Las quejas del vecindario en el barrio de O Calvario son diarias
11 abr 2024 . Actualizado a las 02:18 h.Varias patrullas de la Policía Nacional y de la Policía Local acudieron ayer a una casa okupada del Camiño Medeiros, en el barrio de A Doblada, en O Calvario. Para los vecinos y comerciantes de la zona, es el pan nuestro de cada día. Los residentes del entorno están cansados de llamar a las fuerzas del orden por los altercados que se producen en torno a la vivienda. Los agentes acuden con mucha frecuencia a esta vivienda en la que reside una familia con menores de edad a su cargo.
Ayer al mediodía más de una decena de agentes acudieron a este domicilio. Era la segunda vez que lo hacían en la misma jornada, puesto que ya se presentaron a primera hora de la mañana, tras recibir la llamada de los vecinos. Residentes de la zona relatan que la casa es como una olla a presión y que los agentes acuden casi a diario. Los gritos y peleas les sobresaltan a cualquier hora del día o de la madrugada. La convivencia se hace difícil en el clima de tensión continua que se vive en torno a esta vivienda okupada. La situación ha sido denunciada en los tribunales. Los okupas tienen una orden de desalojo del inmueble. Según fuentes cercanas, el lanzamiento está fijado para la próxima semana. Intentan frenar que los echen de este lugar, puesto que no tienen ningún otro lugar alternativo donde ir.
La vivienda se encuentra en una zona muy próxima a la calle Martínez Garrido, a la altura del mural artístico creado por Nelson Villalobos en homenaje a las víctimas del franquismo. Se accede desde esta avenida bajando unas escaleras. La casa se encuentra en muy mal estado. En la finca anexa se acumulan desperdicios. Los vecinos denunciaron la existencia de un vertedero incontrolado en la zona el año pasado. Denuncian que queman basura al aire libre. La policía tiene constancia de que hay trapicheo de drogas. Uno de los okupas se encuentra en prisión y también hay otra persona en arresto domiciliario.
Robos
Otros barrios de Vigo también sufren la pérdida de calidad de vida que supone estar al lado de una vivienda okupada cuyos moradores no respetan las normas de convivencia. Son frecuentes los avisos por robos. En la parroquia de Valadares, por ejemplo, una pareja sembró el terror el año pasado porque se dedicaban a entrar a robar en las casas y comercios del barrio. También en Lavadores otros vecinos se concentraron hace meses para pedir la expulsión de una familia okupa que les hace la vida imposible con gritos y peleas a cualquier hora del día o de la noche, recibiendo en este caso el apoyo de la asociación vecinal de Lavadores.
Un acusado de vender cocaína al menudeo en su domicilio de Vigo aceptó ayer tres años y un día de cárcel y una multa de mil euros. A veces mezclaba la droga con cafeína. El acuerdo se alcanzó en una vista de conformidad celebrada en la Quinta Sección de la Audiencia en Pontevedra, con sede en Vigo. Le impusieron la agravante de reincidencia porque en el 2021 le suspendieron una condena por drogas y siguió vendiendo.
La Fiscalía pedía inicialmente seis años de cárcel pero le hizo una rebaja a cambio de su confesión. Los hechos se remontan al primer cuatrimestre del 2022. Los agentes detectaron cinco ventas en su domicilio desde febrero a abril.