La residencia SanXe de A Guarda, pendiente de un dictamen de la Xunta
21 jun 2024 . Actualizado a las 20:41 h.Sesenta personas con diversidad intelectual están a punto o de perder, debido a la expropiación de una parcela adyacente de cien metros cuadrados para un vial, las que iban a ser sus primeras 30 viviendas en pleno centro de A Guarda. Se trata del proyecto residencial impulsado por la asociación San Xerome Emiliani, pionero en Galicia y respaldado por la Consellería de Política Social e Xuventude.
Fogares Sanxe peligra por la apertura de un vial en el solar trasero del emblemático y secular edificio de Colegio de las Hermanas Carmelitas que sus propietarios cedieron para ejecutar el proyecto. «O la Xunta aprueba la urgente ocupación de los 100 metros cuadrados que les ha pedido el Concello o vamos a perder las casas y los seis millones de euros para el proyecto. Además, nos quedaríamos con una deuda de 600.000 euros, que es lo que ya invertimos en el desescombro del edificio», advierte Feliciano Valcárcel, gerente de la asociación.
Tienen el dinero y les sobran las ganas, pero los trabajos están parados desde abril del 2023 y la contrarreloj se agota porque los pisos han de estar acabados en diciembre del 2025 y ya llevan más de un año de retraso.
Según el Plan Xeral de A Guarda de 1993, la rehabilitación del inmueble está supeditada a la apertura de un vial cuya construcción también debería ejecutar el promotor. Cuando San Xerome pidió la licencia de obra, explican, en el Concello le dijeron que les faltaba ese trámite. «Nosotros ya cedimos al Concello los terrenos necesarios pero faltan 100 metros de la esquina de la parcela de otro propietario. Intentamos una permuta o comprarle ese trozo, pero no lo conseguimos», indican.
En cualquier caso, y como Plan Xeral contempla un vial entre la avenida República Argentina hasta la puerta sur del Castelo de Santa Cruz, el pleno de A Guarda aprobó el 14 de marzo el expediente de inicio de expropiación de los terrenos y una semana después remitió a la Subdirección Xeral de Réxime Xurídico Local de la Xunta la solicitud de urgente ocupación. En el expediente se argumenta la utilidad pública de la apertura del vial, que «tiene bloqueado el desarrollo urbanístico de una parte relevante de suelo urbano, lastrando el cumplimiento del plan urbanístico». «Lo deseable habría sido la aprobación de un proyecto que contemplase la urbanización, previa expropiación, del vial en todo su trazado, pero la situación económica del Concello no permite afrontar un proyecto tan ambicioso», indica. El pleno considera suficientes las razones de interés general y urgencia que, además, vinculan el desarrollo del proyecto Fogares Sanxe con una valoración para la expropiación de la parcela por justiprecio de 48.184 euros.
Pionero
La entidad ha enviado al presidente de la Xunta y a la conselleira Fabiola García (su departamento aportó 2 millones para el proyecto) una misiva de socorro para agilizar el procedimiento. «Es urgente que el Consello de la Xunta apruebe la urgente ocupación porque el proyecto de los hogares está en grave riesgo. Se acaba el plazo para poder ejecutar la obra», advierte la entidad. En abril del 2023 acabaron la demolición del interior del inmueble y su refuerzo para asegurar su viabilidad con una inversión inicial de 600.000 euros.
Fogares Sanxe se ideó para garantiza el derecho a la emancipación de personas con diversidad intelectual y el apoyo a la conciliación de sus familiares. Serían las primeras viviendas inclusivas de Galicia ya que no es el modelo residencial tradicional sino un proyecto piloto de cohousing. «Es un modelo pionero en Galicia, y el que mejor se adapta a nuestras expectativas», explicó durante la presentación del proyecto Feliciano Valcárcel «Los inquilinos serán cogestores de sus propios hogares, vivirán en ellos sin alejarse de su entorno, podrán participar en la toma de decisiones y contarán con una amplia carta de servicios complementarios», argumentó.
Sesenta personas con diversidad intelectual se juegan ahora el empezar una nueva vida en el 2026. «Todo depende de que la licencia de obra del Concello, supeditada a la decisión del Consello de la Xunta, llegue a tiempo», apuntan en la entidad.