Vecinos de O Hío, en Cangas, cortan el tráfico ante el colapso por las playas: «También tenemos derecho a vivir»

VIGO

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La asociación de Pinténs dice que están desesperados con la afluencia de vehículos y la ocupación de caminos y entradas a viviendas

20 ago 2024 . Actualizado a las 01:21 h.

Ni en Rande ni en las inmediaciones de la autovía. El colapso en los accesos a las playas de Cangas se ha intensificado hoy en O Hío. «Desesperados» tras un problema de saturación de tráfico que se agrava sin remedio, han sido los propios vecinos los que se han plantado en la carretera. «Todos tienen derecho a ir a las playas, pero los vecinos también tenemos derecho a vivir», advierte la presidenta de la asociación de vecinos de Pinténs, Mercedes Villar.

Durante unos 37 minutos, desde las 11.30 horas, más de medio centenar de vecinos ocuparon a lo largo y ancho el paso de peatones de O Buraquiño para visibilizar una problemática que les afecta a su día a día y a la que ningún gobierno local ha conseguido aún poner remedio. Poco más de media hora en la que ejemplificaron lo que ellos padecen constantemente, que es la invasión de espacios privados, caminos, entradas de casa o zonas de vado incluso que toman los conductores sin escrúpulos.

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«Los problemas de tráfico ya son habituales, pero este año se han triplicado como mínimo. Es una avalancha de coches que no solo contamina si no que afecta a la vida de todos porque aparcan donde les da la gana», advierte Mercedes Villar. Su situación y reclamación es tan evidente que hasta un nutrido grupo de conductores que tuvieron que parar en seco sus vehículos, a pleno sol, se sumaron a la comotiva que deambuló por el paso de peatones como acción de visibilización.   

No están en contra del turismo ni mucho menos. No se trata de turismofobia, sostienen. Lo que reclaman es «convivencia» y ese derecho a mantener una calidad de vida que se pone en riesgo cada vez que suben las temperaturas en verano, con situaciones que ponen en riesgo tanto el tráfico como la seguridad de los vecinos, a los que a veces, los dejan encerrados en sus propias casas. El Concello ha habilitado más leirapárking, pero no se respetan señales, ni líneas amarillas. «Ahora se invaden hasta caminos particulares y fincas privadas. Es imprescindible un plan porque esto es insoportable. Sabemos que a lo mejor no hay una solución inmediata ni completa, pero algo hay que hacer», insisten los afectados. Confían en reunirse con el equipo de gobierno en los próximos días, «aunque ellos no tienen la solución en sus manos, porque también depende de otras instancias», dicen y destacan que «La Policía Local no puede acudir porque no es su competencia y en el cuartel de Cangas solo hay una patrulla de la Guardia Civil». 

«Fue un acto para dar la voz de alarma y concienciar. Queremos que la gente sea cívica y comprensiva y que si ven que no hay un sitio para aparcar, que se vayan, como hemos de hacer todos en cualquier ciudad», recuerdan. 

La protesta se escenificó en O Buraquiño, que es la primera entrada a las playas de Pinténs, San Xián, Castiñeiras y Vilanova.

La presidenta de la asociación de vecinos de Viñó ratificó el malestar vecinal por una situación que se agrava sin soluciones. «Aún es peor ahora porque además de venir más gente, la Policía Local no actúa, así que se aparca donde se quiere sin miedo a multas, con impunidad total », advierte Esperanza Veiga. Insiste en la necesidad de actuaciones urgente y contundentes. «El gobierno nos dijo en agosto del año pasado que aún acababan de llegar, pero que le diéramos tiempo y que habría un plan de tráfico, pero no se ha hecho nada», asegura. Ellos no secundaron la protesta «porque en Viñó no hay pasos de peatones», aunque propuso otras alternativas porque el problema es común. «Es un caos, las aldeas se colapsan y el gobierno local actúa con pasotismo, cuando gestionar y gobernar es buscar soluciones», dice.