El patrimonio, a veces, también se recupera

Jorge Lamas Dono
jorge lamas VIGO / LA VOZ

VIGO

Administraciones y particulares han rescatado diferentes elementos culturales en Vigo y su área metropolitana en los últimos años

31 dic 2024 . Actualizado a las 01:20 h.

Aunque es más el patrimonio que se deja perder, es cierto que también algunas administraciones públicas y particulares lo recuperan. Es una cuestión de voluntad política y de dotación económica, seguramente impulsadas ambas por la sensibilidad cultural. En Vigo y los municipios del sur de la provincia se han recuperado piezas y conjuntos de gran valor histórico y artístico durante los últimos años. Es el caso en la ciudad olívica de las galerías subterráneas del castillo de Nuestra Señora de O Castro. Fueron abiertas al público en mayo del 2023, junto con la musealización de otras zonas del castillo del siglo XVII. El Gobierno de España aportó los 1,4 millones de euros necesarios para su puesta en valor. Para visitarlas es necesario realizar una reserva previa en la web fortalezadeocastro.vigo.org.

El mismo Gobierno de España, también por iniciativa del Concello de Vigo, invirtió 1,5 millones de euros en la rehabilitación del pazo de Raposeira, en Sárdoma, un edificio del siglo XVII que hacía años que se caía por dejadez municipal, Administración propietaria del inmueble. De esta forma, el Concello de Vigo, que aportó algo más de trescientos mil euros a la rehabilitación, dispondrá de dos pazos visitables. Los pases guiados para la ciudadanía comenzarán a desarrollarse el próximo mes de enero.

El Concello de Vigo afrontó este mismo año la segunda campaña de excavación y mantenimiento del dolmen conocido como Casa dos Mouros, en Candeán. El monumento megalítico tiene una antigüedad que sobrepasa ampliamente los cinco mil quinientos años. Los arqueólogos pudieron conocer el empedrado típico de estas cámaras funerarias, así como que en sus orígenes presentaban sus ortostatos ciertas pinturas de color rojo. El Concello anunció que el próximo año seguirán las investigaciones arqueológicas en ese mismo espacio.

Aunque no fue una actuación premeditada, el Concello de Vigo abrió la pasada primavera la posibilidad de investigar el pasado castreño de A Guía. Un equipo de arqueología, durante los sondeos previos a una mejora de la instalación eléctrica de parque, encontró restos de viviendas del castro. En la primera valoración, expertos en arqueología apuntaron la posibilidad de que se tratase de un castro poco romanizado, similar al de Toralla. La confirmación de esa hipótesis solo será posible si el Concello de Vigo se decide a contratar una excavación más amplia en la ladera orientada hacia el este.

En el plano arqueológico, en el municipio de Vigo, la Xunta de Galicia realizó sendas prospecciones en las islas Cíes y en el entorno del Museo do Mar. En el primer lugar, se actuó en una zona próxima al antiguo monasterio, en la isla de Monteagudo. La ausencia de información por parte de la Xunta no permite aún determinar el alcance de la investigación. En el caso del Museo do Mar, los restos hallados apuntan a que podría tratarse de una villa de época romana. En los próximos meses podrían continuar las investigaciones en el solar.

En los últimos años, uno de los elementos patrimoniales más fructíferos, desde el punto de vista del conocimiento histórico, ha sido el castro de Pereiras, en Mos. Allí, la comunidad de montes, con el apoyo económico de la Consellería de Cultura, ha afrontado varias campañas arqueológicas, que han aportado importantes descubrimientos. El más relevante es que hace dos mil años, el poblado castreño funcionaba como un centro metalúrgico y, anteriormente, mantuvo relaciones comerciales con culturas mediterráneas, como la púnica. Hace un par de meses, el equipo de arqueología sacaba a la luz los restos de una gran casa romana. Si continúan las excavaciones, el lugar, seguramente, seguirá aportando grandes novedades científicas.

«A Torre de Meira pasou de ser un lugar inexplorado a un castelo medieval mundialmente famoso en pouco máis de tres anos. Agora é un orgullo para Moaña», decía hace unas semanas el arqueólogo Benito Vilas en La Voz. En la campaña de este año, íntegramente pagada por el Concello de Moaña, salió a la luz la segunda muralla que rodeaba la torre de homenaje. La torre medieval también pide nuevas campañas de excavación debido a sus singularidades.

A finales del pasado año se concluía la rehabilitación integral del conocido como Ponte das Febres, situado en Tui, en el trazado del Camino Portugués a Santiago. Es un paso realizado en el siglo XII, que está relacionado con la vida de San Telmo. La rehabilitación permitió descubrir una escalera de piedra también de origen medieval que se utilizaba de embarcadero cuando el nivel del agua permitía la navegabilidad del río.

Este mismo mes también se produjo una incorporaciones al Catálogo Galego de Árbores Senlleiras, lo que implica una mayor protección. Se trata de un alcanforero ubicado en el entorno del castillo de Sobroso, en Mondariz. El Cinamomum camphora fue seleccionado por su imponente porte, antigüedad y relevancia histórica.

Así que el patrimonio, de vez en cuando, es atendido de una forma adecuada. Y en tres semanas se verá gratamente aumentado con la llegada a Nigrán del famoso mosaico romano de Panxón. Tras años sin que se supiera su paradero, en el año 2018 fue localizó en el catálogo de la casa Carlton Hobbs de Nueva York. La pieza fue comprada con la aportación de 40.000 euros del Concello de Nigrán y 18.000 de particulares y, tras un largo periplo, llegará en enero a Nigrán. Lo curioso del caso es que ahora se expone en Madrid.