La jueza considera que, a pesar de tener diagnosticado un trastorno, estaba en sus plenas facultades cuando perpetró el delito contra una alumna de la Escuela de Idiomas de Vigo
13 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Un joven que alegó que era autista y nunca tocaba a la gente, para justificar que no había hecho tocamientos a una alumna de la Escuela de Idiomas de Vigo, ha sido condenado a dos años de cárcel. El Juzgado de lo Penal número 1 de Vigo lo considera culpable de un delito de abuso sexual (porque la ley anterior al solo sí es sí es más favorable al reo) y, además de prisión, le condena a estar cuatro años alejado 200 metros de la víctima y a indemnizarla con 500 euros.
La jueza sostiene que aunque el médico forense diagnosticó que el acusado tenía un trastorno obsesivo compulsivo «no es posible establecer un nexo causal entre ambos» porque en el momento de los hechos denunciados sus capacidades estaban preservadas. La magistrada «no tiene la más mínima duda» de que los hechos han ocurrido como los relató la víctima.