Los equipos de emergencia han logrado estabilizar el fuego en A Cañiza, que ha recuperado su actividad con ritmo habitual en el polígono industrial de Ridabil
01 ago 2022 . Actualizado a las 15:17 h.Las comarcas interiores del sur de Galicia arrancan el mes de agosto abrasadas por el fuego. A Paradanta y O Condado, en concreto, inmersas en el área de influencia de Vigo, llevan tres días lidiando con incendios forestales que se han llevado por delante más de medio millar de hectáreas. El fuego en Arbo continúa activo —el desastre comenzó el pasado sábado— y ha devorado 485 hectáreas, según cifras aportadas por el alcalde local, Horacio Gil, del Partido Popular. La consellería de Medio Rural, sin embargo, mantiene que son 400 las hectáreas calcinadas, como anunciaron ayer. Pero continúan declarando el fuego en estado activo. Es el primer gran incendio del año en la provincia de Pontevedra. Sigue decretada la situación 2 de emergencia por la proximidad de las llamas al núcleo de As Searas. «La colaboración de los vecinos está siendo espectacular», agradece el edil local.
Casi sesenta efectivos de emergencia actuaron también este fin de semana en A Cañiza para desactivar un fuego que se llevó por delante otras 25 hectáreas de bosque. A las 01.10 horas de esta madrugada se declaró el estado «controlado» este incendio en A Paradanta, que obligó a suspender el tráfico de la A-52 y a declarar la situación 2 de emergencia debido a su proximidad al polígono industrial. «Cuatro focos en una misma parroquia es muy sospechoso», apunta Luis Antonio Gómez Piña, sobre el origen de las llamas, en Oroso. La actividad en el parque industrial de Ribadil se ha recuperado «con normalidad». El edil agradece los esfuerzos y la responsabilidad de los vecinos e insiste en la necesidad de reflexionar «más allá de la época estival» en «la necesidad de reorientar la política forestal».
Otras 20 hectáreas fueron arrasadas muy cerca, en Ponteareas. El fuego fue causado en la parroquia de Padróns; una de las zonas cero habituales en el mapa gallego de los incendios.
Intencionados
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha vuelto a insistir esta mañana en que los incendios de Arbo y A Cañiza fueron intencionados. Coincide con una oleada iniciada el sábado en Arbo y prolongada ayer en Ponteareas, O Porriño y Mondariz dejando 530 hectáreas calcinadas. Desde Medio Rural apuntan a cuatro factores para apoyar esta tesis: la hora a la que se produjeron los focos —eran cerca de las tres de la mañana—, las condiciones meteorológicas del fin de semana, influidas por las altas temperaturas y fuertes rachas de viento, el hecho de que los focos se ocasionaron en un sendero y el escenario de las llamas, que ya habían sido pasto de incendios en otras ocasiones.
«Todas las circunstancias apuntan a que se trata de un fuego intencionado», refrenda el alcalde de Arbo, la localidad más dañada por el fuego.