Diego Ibáñez (Carolina Durante): «Ver a cayetanos cantando "Cayetano" es algo que me hace mucha gracia»
BAIONA
El grupo actúa mañana en el festival Barbeira Season Fest de Baiona que empieza hoy y dura hasta el próximo domingo
31 ago 2022 . Actualizado a las 10:29 h.Cuando formaron el grupo, los componentes de Carolina Durante tenían clara una cosa: «Queríamos ser divertidos, que aunque no fueras fan nuestro la música te incitara a moverte y pasarlo bien». Lo dice Diego Ibáñez, ese explosivo vocalista que canta los estribillos como proclamas regadas de humor, verdad y emoción. Mañana actúan en el festival Barbeira Season Fest de Baiona, que arranca hoy. Durante cuatro días acogerá a grupos como León Benavente, Zahara, Depedro, La Habitación Roja, Capicua y Maika Makowski, entre otros.
—Escuchándolos da la sensación de que todo es sencillo y fluido. ¿Los temas les salen fácilmente?
—Antes nos salían más. Este es el primer grupo que hemos tenido los cuatro. Todo era nuevo. Ahora hay canciones que ya hemos hecho y no sale todo tan fácil
—Para ser su primera banda, todo fue como la seda: triunfaron desde el primer momento.
—Todo iba perfecto hasta la pandemia. Para nosotros el directo es muy importante. Creo que si nos ves en directo luego escuchas los discos de forma diferente.
—En las discursiones sobre la supuesta muerte del rock, Carolina Durante suelen salir a colación como ejemplo de banda de guitarras que entusiasma a los veinteañeros. ¿Se ven como unos salvadores?
—Sí que es verdad que tenemos público de todas las edades, pero la mayoría es joven, incluso más que nosotros. Es algo genial, pero no nos consideramos los salvadores de nada. El rock de guitarras tuvo su momento, pero sigue habiendo muchas bandas. De hecho, hay una especie de revival del punk-rock americano. Además, ahora salen muchos traperos con banda en sus directos. A mí eso me hace mucha ilusión, porque ver a un grupo tocar es otra cosa. Pero igual que te digo esto, te digo que vi a Rosalía en Madrid y me flipó.
—Rodrigo Caamaño (Triángulo de Amor Bizarro) dice que la sensación de tener 20 años, enchufar una guitarra y hacer ruido a lo loco es inigualable. ¿Le pasa?
—Sí. Esa sensación es única, pero también es verdad que a mí me flipan las guitarras y es lo que realmente me emociona. Puedo escuchar distintos tipos de música, pero el sonido de una guitarra a todo volumen es lo que me llega adentro. En ese sentido, quiero que los chavales se sigan emocionando con eso. Me viene bien para el grupo [risas].
—¿Se sienten en la linea de Siniestro Total, Nikis, Los Planetas y Los Punsetes?
—Sí, totalmente. Todos son nuestros referentes. Es la música que hemos escuchado toda la vida. Nos fijábamos en eso. Cuando empezamos hicimos una lista de Spotify para volcar lo que nos podía gustar. Estaban todos ellos.
—Usan mucho la ironía, algo complicado hoy en día. ¿Le dan muchas vueltas a lo que dicen?
—Yo creo que te tienes que dejar llevar y escribir lo que te salga. Solo pensar en eso. Luego, cuando ya la canción está hecha, si hay algo que te chirría dale una vuelta. No tiene más. Aunque es verdad que por momentos esto se ha convertido en La Inquisición de lo que se dice y lo que no.
—Además de lo irónico hay unos Carolina Durante muy emocionales que van a pecho descubierto, los que canciones como «Colores» o «Joder no sé».
—Son nuestras dos caras. Una es la más visceral y pasional y la otra va más con la ironía y las risas. Siempre eché en falta que los Nikis escribieran alguna canción de amor [risas]. Me hubiese gustado que se hubiesen mojado en ese sentido. Está muy bien que un grupo tenga una personalidad muy marcada. Pero siempre me he preguntando qué pasaría.
—Son el grupo de «Cayetano». ¿Es un lastre o un estandarte?
—Una canción así te aúpa y se echa hacia arriba, pero mucha gente esperará más canciones iguales. Tiene su parte buena y mala. Creo que hemos salido ganando, la verdad. Pero bueno, vas por ahí y te suelta: «¡Cayetano!». Y te dan ganas de soltarle un bofetón [risas].
—¿Muchos de los que la cantan son lo que describe?
—Sí, pero a mí ver a cayetanos cantando Cayetano la verdad es que me hace mucha gracia.
—¿Es algo similar a cuando los Hombres G cantaban aquello de «ella se fue con un niño pijo» y lo coreaban miles de pijos?
—Total. El otro día tocamos el Canela Party, un festival en el que la gente va disfrazada. Había muchos que iban de cayetanos. Pero los verdaderos cayetanos iban de otras cosas. Era muy curioso.