Exceso de caudal con troncos y basura al no poder cerrarse Frieira. En Cangas cayó el revestimiento de una fachada
19 dic 2019 . Actualizado a las 09:32 h.La ribera del Miño está en estado de alerta con previsión de que el nivel del agua siga subiendo y pueda inundar zonas de los municipios fronterizos, desde Crecente hasta la desembocadura. La Comandancia Naval del Miño y la Capitanía Marítima de Caminha han emitido sendos comunicados en los que advierten del riesgo y piden que se extremen las precauciones.
El río baja fuera del cauce desde hace días y, de hecho, la madrugada del martes ya fue crítica. Las previsiones meteorológicas, con la borrasca Elsa descargando agua sobre uncauce cuya corriente ha ganado gran velocidad, obligan a extremar las precauciones dentro y fuera del mismo. Se trata de una alerta, indica la Comandancia Naval del Miño, «para prevención por el agravamiento del caudal y de las precipitaciones». Es necesario que la presa de Frieira continúe liberando agua al río, añade, por lo que en algunos tramos ya se superaron los límites máximos de caudal.
No solo preocupa la cantidad de agua y el viento adverso, sino la carga añadida de materiales con la que baja el río y que multiplican la peligrosidad. «Toda la navegación prestará la debida atención y resguardo por la existencia en el río de muchos elementos extraños, como maderas, troncos y basuras, que puedan constituir un peligro para la navegación», informó el comandante naval del Miño, Juan Díaz Rodríguez.
Portugal lanza la misma advertencia, recomendando a la población que evite aproximarse al río o practicar cualquier actividad lúdica en su entorno, a la vez que insta a proteger las posesiones que puedan resultar afectadas por los posibles anegamientos.
Los municipios ribeireños ya han empezado a tomar medidas. En Salvaterra do Miño, donde el agua ya cubre parte del paseo y llega casi hasta el parque de A Canuda, la Policía Local ha precintado el paso al tráfico rodado y también se han cerrado las termas, según confirmó la alcaldesa, Marta Valcárcel.
En Redondela, la atención se centra en el río Maceiras. Las intensas lluvias han provocado también su desbordamiento y, por ello, la Concejalía de Medio Ambiente ha decidido cerrar el acceso al paseo desde la calle Rabadeira Canabal, que está la altura del Tau Cerámica. El motivo es el estado del puente de piedra que cruza el lecho desde este acceso ya que, al parecer, no reúne unas condiciones óptimas de seguridad debido a los daños causados por la fuerza de las riadas de los últimos días. Con todo, el paseo fluvial puede ser transitado en el resto de tramos. El problema reside, explican en Medio Ambiente, en un muro de contención cedido dentro del lecho y un árbol caído con la raíz dentro del curso del agua. El responsable de Medio Ambiente, Roberto Villar explica que el cierre de la ponte es una medida preventiva para evitar cualquier incidente.