La alternativa virtual se consolida ante la escasez de dinero efectivo
11 ago 2020 . Actualizado a las 16:45 h.Turuta, jarama, grama... Solo en España, hay más de una treintena de monedas sociales. El fenómeno llega ahora a toda Galicia de la mano de la asociación Consello da Sabia, que ha puesto en marcha la moneda del mismo nombre. Se trata de una alternativa local complementaria al euro, «un sitio para coger aire y ofrecer lo que tienes, sin depender del dinero de curso legal», en palabras del secretario de la asociación, Carlos Moreira.
El único antecedente gallego fue la landra, a nivel local en Santiago. La sabia es de ámbito gallego y unos de sus primeros socios son los comuneros de Couso, en Gondomar. El secretario de este consello, que es el banco que emite la moneda virtual, es también de Gondomar y los demás miembros son de Lugo y Santiago. «Ya se creó y se distribuirá entre las asociaciones, entidades o grupos de consumo para que ellos, a su vez, la pongan en circulación mediante el pago a personas que trabajen para ellos. Luego, la gente con sabias o con cualquier cosa que quiera ofrecer y que utilicen esta aplicación de ámbito gallego, pueden realizar transacciones», indican. Los intercambios pueden ser de alimentos, ropa o cualquier otra categoría, incluyendo bancos de tiempo.
Los comuneros de Couso pagarán con esa moneda local a los que este año participen de la recogida de castañas. «Pagarémoslle con sabias a medio cento de comuneiros e tamén, xa está falado, á empresa que vai facer o traslado de toda a mercancía ata Manzaneda», avanza el presidente de la comunidad de montes, Xosé Antón Araúxo. Para él, que fue quien impulsó el primer banco público gallego de microcréditos a emprendedores entre vecinos, esta moneda es fundamental, especialmente válida tras la pandemia.
«Esta fórmula é unha táboa de salvación para as persoas e familias máis vulnerables. Evitamos os intermediarios e, antes de que desapareza o diñeiro físico e que todo se controle con criptomonedas, hai que ter unha alternativa para que a xente non quede excluida», advierte Araúxo defendiendo a ultranza una iniciativa consolidada tanto en otros puntos de España como de Inglaterra, donde hay alcaldes que cobran sus nóminas en las respectivas monedas locales o sociales.
El nombre se refiere a su ámbito y carácter porque son proyectos que, en general, buscan fomentar el comercio local y el intercambio en los ámbitos geográficos que las adoptan, como en este caso es Galicia. Bernard Lietaer, el ingeniero, economista y escritor belga, fue el promotor de esta idea de que las comunidades puedan beneficiarse creando su moneda local o complementaria, circulando paralela a la nacional. Él definió este dinero local como «un acuerdo dentro de una comunidad de usar algo como medio de intercambio, tanto de productos como de conocimientos o servicios».
Ha sido una asociación holandesa sin ánimo de lucro, explica Moreira, la que ha facilitado la promoción de estas monedas donando para ello la app Cyclos 4, a través de la que cada comunidad desarrolla su proyecto. En este caso, toda la información y registro se puede hacer en la página asabiagalega.wordpress.com. Ya está operativa para nuevas altas en este nueva comunidad gallega de comercio alternativo.