Dimite en bloque todo el gobierno de Mondariz al no apoyar la oposición los presupuestos

El alcalde de Mondariz, Xoán Carlos Montes Bugarín y sus cuatro ediles han presentado su dimisión tras no conseguir el respaldo suficiente para sacar adelante los presupuestos. Han tomado esta decisión «ante el bloqueo absoluto de los tres grupos de la oposición que desde el inicio de la legislatura permanecen unidos para paralizar cualquier avance, inversión o mejora para la ciudadanía», señalan. El regidor, conocido como Calis, dice que «sacrificarán toda la dedicación de estos años para pasar a ser de la oposición y permitir que un nuevo gobierno de alianza de los tres grupos de luz verde a las necesidades de los vecinos». Numéricamente es posible un cambio de gobierno ya que AporM asumió la alcaldía con solo cinco ediles y hay seis en la oposición: el PP tiene tres ediles; 2 del BNG y uno del PSOE. Además, en el mandato anterior el PP apoyó la investidura del nacionalista Xosé Emilio Barros. Sin embargo, no parece que sea esta la fórmula que vaya a descongestionar el bloqueo. Es una dimisión sin renuncia, por lo que el gobierno local se mantiene al frente en funciones,

La secretaría convocará un pleno extraordinario en el que se dará cuenta de esta renuncia y, del que, según el gobierno actual, saldrá otro que tendrá hasta finales de septiembre para aprobar unos presupuestos y un plan de ajuste «que salven a Mondariz de la parálisis». «Si el problema es AporM, nos apartamos, pero seguiremos luchando desde la oposición», explica líder de la formación, Xoán Carlos Montes, envió una carta a la oposición para intentar negociar la aprobación de los presupuestos, ofreciéndose a renunciar a una segunda dedicación para los miembros de su gobierno y a repartir la suya con otros tres concejales del gobierno. La única contestación de los grupos de la oposición fue que primero debería contestar el alcalde a los recursos que ellos presentaron. Tanto el PP, como el BNG con el PSOE presentaron alegaciones tras retirar del orden del día el punto de los presupuestos que ya estaba en debate después de que ellos hubiesen aprobado unas enmiendas que presentaron de forma conjunta. Consideran que ya no había lugar a la retirada del tema y que esas enmiendas son vinculantes, por lo que reclaman un pleno extraordinario, pero para culminar una votación que se resolvería a favor de la oposición. En su propuesta, además de no admitir la segunda dedicación que pretendía AporM, figuran, entre otros temas, el desarrollo del suelo empresarial o la redacción del PXOM.

«La irresponsabilidad es tan grande que ni siquiera renunciando a todas nuestras propuestas se quieren sentar a negociar», lamenta Calis.

Advierte que «la intervención del Estado es inmediata y ahogará la economía del municipio». Se refiere a las consecuencias que se derivarán para el Concello, cuyo presupuesto es de 2,7 millones, si no se consigue financiar a 14 años los 1,6 millones de euros que se adeudan al Estado, en vez de en 5 anualidades y pagar a los proveedores. Sostiene que «no es un juego de estrategia».

Las primeras reacciones no se han hecho esperar. El edil nacionalista Xosé Emilio Barros, no ocultó su sorpresa por esta dimisión, que tacha de «unnha irresponsabilidade e infantilismo sen precedentes». Sostiene que esta decisión evidencia «unha vez máis a incapacidade de negociación do goberno local que vén desde o comezo do mandato». «Si houbo tamén no tema dos orzamentos dúas reunións, pero nunha un intercambio de pareceres, eles non daban argumentos mentres nós defendiamos a redución de gasto e inversións estratéxicas», dice el concejal y ex regidor del BNG. 

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