La situación deseperada de las familias de diez jóvenes con autismo que no tienen plaza en un centro de día para adultos en Vilagarcía
NIGRÁN
El centro alternativo más próximo que les ofrece la Xunta está en Nigrán
11 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Diez jóvenes con autismo que acaban de finalizar la etapa escolar, o que están a punto de hacerlo, no tendrán plaza para continuar con su desarrollo en un centro de día para adultos en Vilagarcía. Así lo ha denunciado la asociación Mecos, de BATA. Se trata de jóvenes de entre 18 y 21 años de edad que se van a ver privados, dicen sus familias, de los servicios y atenciones que necesitan en la vida adulta al encontrarse el centro de día que gestiona BATA saturado, al límite de su capacidad.
Así lo explica José Panadero, presidente de la asociación de padres y madres Os Mecos. «El problema —argumenta— surge porque el centro de día de la Asociación BATA está completo, solo queda una plaza vacante, y tampoco hay ningún otro centro especializado en nuestra zona, por lo que nuestros hijos no van a tener vacantes de atención especializada en su etapa de vida adulta».
Las familias consideran que la mejor solución es poder dar continuidad al vínculo de estos diez jóvenes con BATA, «la asociación que siempre ha trabajado con ellos y en la que han logrado importantes avances». Pero dados los problemas que plantea dicha alternativa, las familias, «conscientes de lo que se les venía encima», decidieron pedir una reunión con la directora xeral de Persoas con Discapacidade, Begoña Abeijón, para exponerle la situación. Pero de aquel encuentro salieron aún más descorazonados de lo que habían entrado: la única propuesta que les realizó la Xunta, dicen, es «solicitar plaza en el centro de día Castro Navás que la Asociación Menela tiene en la localidad de Nigrán, cercana a Vigo». «Esta solución nos parece inviable ya que el centro que nos ofertan se encuentra a más de 80 kilómetros de Vilagarcía, lo que supondría para nuestros hijos un desplazamiento en transporte de más de tres horas diarias», manifestó el portavoz del ANPA.
Además, apuntan también, «para las personas con trastornos de espectro autista es fundamental su entorno de referencia», que perderían por completo de confirmarse su traslado a Vigo. «La otra alternativa que tienen las familias es dejar a los chicos y las chicas en casa, con lo que eso supone», explica Panadero.
Desde el colectivo aseguran estar afrontando una «situación desesperada», ya que si no consiguen plaza en centros adecuados para personas con trastornos del espectro autista, es probable que se produzca un retroceso en el trabajo realizado a lo largo de los últimos años. «Todo el trabajo realizado con nuestros hijos hasta ahora se volvería inútil, ya que la falta de terapias les haría perder la mayor parte de las destrezas adquiridas», señalan desde el ANPA.
Hay mucho en juego y, precisamente por eso, las familias no tienen previsto reunirse. «Ante la falta de una respuesta adecuada por parte de la Xunta», de momento han decidido hacer pública su situación. Quieren, de esta forma, llamar la atención de la opinión pública sobre el problema que afrontan estas diez familias y remover conciencias a fin de conseguir que «sus hijos continúen recibiendo la atención especializada que necesitan y a la que tienen derecho en su vida adulta».