Apartan al auditor de Conservas Iglesias por omitir 10 millones en facturas falsas
O PORRIÑO
La histórica empresa de O Morrazo busca comprador en España para salir del concurso
02 nov 2017 . Actualizado a las 22:13 h.Conservas Iglesias es una conservera centenaria que quiere salir del atolladero. Fue fundada en 1907 y es de las pocas que quedan en O Morrazo, junto con Lago Paganini y Palacio de Oriente, aunque esta última tiene su sede principal en Vigo. Iglesias, vinculada la familia del mismo nombre, quiere seguir generando empleo en la comarca, pero para ello tiene que superar un proceso concursal ya iniciado. El gerente de la compañía, Julio Rivas, confirma que la firma está negociando con un grupo español la compra de sus activos con ánimo de permanecer en O Morrazo y en O Porriño, donde también cuenta con instalaciones.
La operación permitirá dar un impulso a la compañía, que está logrando capear una situación que se complicó en los últimos años. El pasado 12 de mayo, el juez titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra declaró la situación concursal firme de la empresa, que acudió al concurso de modo voluntario. La entrada de un nuevo grupo conservero permitiría a Iglesias continuar con un incremento de las ventas. Estas alcanzaron los 16 millones de euros el año pasado. En el 2017 la actividad se ha resentido ligeramente por esta situación, que obliga a llevar a cabo paros de forma puntual que duran pocos días y que se deben a la falta de aprovisionamientos de materia prima por la propia situación de la firma.
La parte positiva es que la factoría se encuentra en una buena situación para solventa los problemas. La empresa tenía unas obsoletas instalaciones ubicadas en la zona portuaria de Cangas. «El año que viene las abandonaremos porque acaba la concesión», señala el gerente de la firma, que ya trasladó su producción al casco urbano de Moaña, donde presenta una renovada imagen con unas grandes instalaciones.
Facturas falsas
El administrador concursal también ha sustituido al auditor de cuentas tras detectar anomalías en años anteriores. El administrador es el despacho de abogados y economistas Lex Poetelia AC SLP, con sede en A Coruña, cuyo administrador es Luis Alberto García-Pombo. La magistrada Nuria Fachal señala en la resolución judicial que justifica el cambio de auditor al haber constatado que hubo «facturas falsas en las declaraciones de IVA» en los años 2013 y 2014 y «el importe de esas facturas asciende a diez millones de euros». La magistrada añade que «a pesar de la gravedad y trascendencia de estos hechos, nada se dice en el informe de auditoría acerca de la apertura de la inspección y de la grave situación que recoge la labor del inspector de la Agencia Tributaria».
Fachal subraya que se «han puesto de relieve graves anomalías en la elaboración del informe de auditoría, ya que cuando se formulan las cuentas anuales de los ejercicios del 2014 y 2015 ya estaba abierto el procedimiento de inspección de la Agencia Tributaria. Nada se dice en la memoria ni en el informe de auditoría». La jueza añade que «las anomalías detectadas por la administración concursal en los informes elaborados por Eudita Censor Juries S.L.P afectan de manera relevante a la interpretación que los terceros pudieran hacer del contenido de cuestas anuales».