El Concello indemnizará con 21.800 euros a una ponteareana por los ruidos de una discoteca

Luis Carlos Llera Llorente
luis carlos llera PONTEAREAS / LA VOZ

PONTEAREAS

El local de copas ha sido clausurado tras una sentencia judicial que pone fin a cinco años de pleito

13 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

Vivir encima de una discoteca puede convertirse en un infierno si el local no adopta las medidas de insonorización reglamentarias. Los vecinos de la calle Castañal, de la zona del Paseo Matutino, una zona residencial con múltiples locales de hostelería y copas han estado durante años batallando para que se cumpliese la ley. El local Liberty tenía licencia para café bar con música pero, según otros hosteleros de la zona, se había convertido en «una auténtica discoteca». No solo eso sino que era una de las que tenía más éxito en el municipio y se llenaba los fines de semana. Una vecina denunció la contaminación sonora y ahora el juzgado número tres de Ponteareas le ha dado la razón condenando al Concello a pagarle 21.800 euros por las molestias.

El nuevo gobierno municipal tomó cartas en el asunto después de que el caso se judicializase y hace un mes cerró el local.

El alcalde de Ponteareas, Xosé Represas, valoró la sentencia indicando que «unha vez máis Ponteareas paga, con cartos, a incompetencia e a ineptitude do anterior goberno do PP presidido por González Solla». El alcalde adelantó que solicitará informes jurídicos para valorar la posibilidad de reclamar al ex alcalde y a su equipo de gobierno los casi 22.000 euros que el Ayuntamiento tendrá que pagar.

En este caso, la vecina afectada por los ruidos interpuso en el juzgado reclamación de responsabilidad patrimonial frente al Ayuntamiento de Ponteareas por no adoptar medidas desde 2009 para evitarlos. La sentencia da la razón a la vecina y destaca que la afectada soportó en el interior de su vivienda durante más de cinco años y de forma continuada niveles de decibelios considerablemente superiores a los permitidos. Según el tribunal, fueron constatados en un total de 24 mediciones realizadas por la policía local y afectaron «necesariamente» a la salud física y mental de la afectada.

Represas pidió perdón en nombre del Ayuntamiento a la vecina perjudicada. «É a miña obriga ética como alcalde a pesar de que a responsabilidade política é doutros, que deberían pedir perdón e pagar os danos», señaló Represas, quien recordó que el actual gobierno fue quien decretó el cierre del establecimiento, que se produjo hace un mes y animó a los vecinos a recurrir al Ayuntamiento cuando se vean afectados por ruidos porque «agora hai un goberno que fai cumprir a lei e protexe aos cidadáns».