La pianista madrileña Rosa Torres-Pardo llevará a Tui, dentro del festival Ikfem, el espectáculo «Desconcierto» junto a la cantaora Rocío Márquez y la actriz Clara Muñiz
19 jul 2018 . Actualizado a las 05:00 h.Rosa Torres-Pardo (Madrid, 1960), creció tocando el piano y se ha convertido en una de las más prestigiosas intérpretes de este instrumento al que ha querido llevar por el camino que escribieron sobre el pentagrama compositores españoles como Granados o Albéniz. Pero antes de llegar ahí, tocó las blancas y negras con cadencias y ritmos diversos, experimentando con el soul, la bossa y otros estilos menos envarados. Esa preocupación, la de hacer llegar la música al gran público, es algo que nunca dejó atrás. La pianista, Premio Nacional de la Música 2017 en la categoría de interpretación, es una de las estrellas del Festival Ikfem, certamen dedicado a los instrumentos de teclado que se celebra entre Tui y Valença. El acto de cierre estará protagonizado por ella, que junto a la cantaora Rocío Márquez y la actriz Clara Muñiz, traerán por primera vez a Galicia Desconcierto, un encuentro entre poesía, escuela pianística española y cante jondo con un repertorio compuesto por obras de Granados, Albéniz, Falla y Turina con textos de García Lorca y Luis García Montero.
-¿Cómo lo explicaría?
-El recital mezcla tres géneros y se llama Desconcierto porque parece que reina el caos antes de encontrar el orden, pero llega y la cosa se vuelve concertada. Llevo muchos años trabajando con García Montero. Hicimos varios espectáculos juntos, con José Luis Gómez y con Ana Belén, combinando música y poesía, que se dan muy bien la mano. Cuando conocí a Rocío Márquez hicimos también un encuentro entre lo clásico y lo flamenco. Ella se acercaba un poco a mi lenguaje y yo al de ella. Nos costó combinar los ritmos pero al final fue una maravilla. Como el Ikfem este año está dedicado a las mujeres, García Montero no vendrá, pero lo hará Clara Muñiz, que es actriz, cantante y además, casualmente, es mi hija, pequeño detalle (risas). Lo malo es que donde hay confianza, ya se sabe. Un día decimos: ¿quedamos para ensayar? Y al final, mira, lo dejamos para otro día que estoy muy cansada...
-¿Trabajan juntas a menudo?
-Sí, en varios festivales. Es bastante natural. Con el trasiego de músicos, cantantes y artistas que hay en mi casa es normal que ella acabara en este mundillo. Ella se sube al escenario con respeto, sabiendo que va junto a dos personas con experiencia, pero también con confianza, porque nos conoce y ella domina también lo que hace. El piano lo toca malamente para acompañarse y al final, si cuadra, cantará con Rocío.
-¿Conoce el festival?
-Sí, me parece muy interesante porque además lo puso en pie y lo dirige una joven pianista muy inteligente y muy dinámica, Andrea González, y el entorno es una maravilla. El festival funciona y creo que tiene un gran futuro, sobre todo porque lo lleva alguien que sabe de música. Por otra parte, veraneo todos los años en Galicia, en Bueu, así que para mí es como estar en casa.
-¿Cómo fue el encuentro con Rocío?
-La escuché cantar y me quedé prendada. Para mí el instrumento más perfecto es la voz y ella la maneja como pocas. Yo me paso la vida estudiando a Granados y Albéniz y hay que tener mucha capacidad vocal para hacer lo que hacen las cantantes líricas. Me parecía que ella podía abarcar otras tesituras, así que le propuse hacer las tonadillas de Granados. Se asustó al principio. Yo disfruto mucho porque me da la libertad que busco y no se tiene con la música clásica. Con Rocío no tengo esa tiranía. Ella, al revés.
-¿Es para todos los públicos?
-Sí. Es más popular de lo que parece: las tonadillas, las canciones de Lorca, La Tarara, Inesita Inés... canciones que hemos escuchado mil veces. Hace años que busco un público que no es el de siempre. Lo hago desde hace casi 20 años. La primera vez fue con Sara Baras.
-¿Qué le parece que el Ikfem este año esté centrado en las mujeres intérpretes?
-Todo que se haga por ayudarnos será bienvenido, porque lo hemos tenido muy difícil y no me parece mal la reivindicación.
Concierto. Se celebrará el martes, 24 de julio, en el Teatro de Tui a partir de las 21.30 horas.
Entradas. Tendrán un precio simbólico de 4 euros y se pondrán a la venta en taquilla una hora antes del espectáculo.
Najla Shami abre mañana los conciertos a orillas del Miño
Tras la espectacular inauguración del año pasado con un concierto simultáneo de 10 pianos en el Puente Internacional, Ikfem vuelve a elegir el entorno del río Miño para su jornada de apertura. La sexta edición del International Keyboard Festival & Masterclass de la Eurociudad Tui-Valença arrancará mañana a orillas del río con una jornada inaugural donde la música de instrumentos de teclado convivirá con propuestas de ocio y la solidaridad con los afectados por la explosión pirotécnica de Paramos y Guillarei.
A partir de las 18.30 horas el Paseo Fluvial de Tui acogerá actividades infantiles, yoga, una zona de alquiler de kayaks (en el puerto deportivo de remo y piragüismo) y una zona gastronómica. Media hora más tarde la artista gallego palestina Najla Shami abrirá la programación de conciertos con su espectáculo Latitudes (músicas de raíz) y a las 20.30 horas Andrea González, directora del festival, dará un concierto con música de Ludovico Einaudi.
El pianista de Salvador Sobral
A 21.30 horas Júlio Resende, el pianista del ganador de Eurovisión Salvador Sobral, presentará Amália, Fado & Further, un espectáculo basado en la improvisación sobre el fado y la obra de Amália Rodrigues. La jornada se cerrará con la actuación del grupo Ghost Beast (música electrónica y art-pop).
El lema de la sexta edición es Women Sound, que tiene el objetivo de visibilizar y reconocer el papel de compositoras e intérpretes femeninas. A lo largo de los 5 días que dura el festival se celebrarán conciertos de reconocidas artistas, sonarán repertorios de obras compuestas por mujeres y se desarrollarán actividades culturales de reflexión sobre la igualdad de género.