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La esposa del administrador de Pilotes Posada ofrece 1,1 millones por la sede y diez inmuebles más

e. v. pita vigo / la voz

VIGO CIUDAD

La oferta incluye a la sede de Pilotes Posada en Vigo.
La oferta incluye a la sede de Pilotes Posada en Vigo. xoán carlos gil< / span>

La sede de la empresa en proceso de liquidación figura entre los bienes que se venden

16 ene 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La esposa del antiguo administrador de la constructora Pilotes Posada, en liquidación, ha presentado una oferta en el juzgado para comprar once inmuebles de la empresa por 1,1 millones de euros más impuestos y que se abonarán mediante cheque a la firma de escritura de la compraventa. Entre los bienes está la sede de Pilotes Posada en el número 44 de la carretera de Baiona, así como cuatro propiedades en San Andrés de Comesaña, cinco en San Paio de Navia y una en Vigo.

Se trata de una pieza separada de la liquidación sobre unos bienes sobre los que el Banco Santander había ejecutado una hipoteca. Esta firma de cimentaciones especiales entró en concurso en el 2012 y aunque llegó a firmar un convenio con el 70 % de los acreedores en el 2013 que no pudo cumplir y entró en liquidación en el 2015 tras medio siglo de actividad. Tenía deudas por 8 millones, que redujo a 6.

La oferta fue presentada el 23 de diciembre del 2015 al administrador concursal de Pilotes Posada, Reestructura Sociedad de Administración Concursal SLP, que la notificó al juzgado de lo mercantil número 3 de Pontevedra, con sede en Vigo. El tribunal ha autorizado dicha venta directa pero da un plazo de diez días para aquellos postores que quieran mejorar la cantidad ofrecida. En caso de haber nuevos interesados, se realizaría una puja.

La única postora hasta ahora procede de Enriqueta Lago, esposa de Pedro Posada, del que tiene un régimen matrimonial de separación de bienes gananciales. El Banco Santander, acreedor privilegiado por una hipoteca, mostró su conformidad con dicha venta directa, según consta en la documentación judicial.

El juzgado autoriza dicha venta directa porque considera que es el cauce más adecuado y ágil dentro de la fase de liquidación y no grava con costes innecesarios a la masa acreedora. Todos los bienes que se venden están afectos al pago de créditos con privilegio especial propiedad de la empresa concursada.