
El Concello cambia la contratación y hará un concurso
29 oct 2019 . Actualizado a las 09:48 h.El Concello de Vigo va a cambiar el sistema de contratación de los cuidadores de barrio para que el servicio pueda estar operativo durante todo el año. Hasta ahora, funcionaba mediante un convenio anual con la Fundación Érguete. Requería interrumpir la actividad durante tres meses, creando un vacío muy grande entre los usuarios que se beneficiaban del trabajo de los cuidadores.
En vista de la gran aceptación que tiene, la administración local le ha dado una vuelta a la forma administrativa de contratación para poder llevarlo adelante de forma permanente. El Concello va a licitar el servicio mediante un contrato de larga duración que contemple su funcionamiento durante todos los meses del año. El nuevo procedimiento de adjudicación será un concurso público, según avanzó ayer el alcalde, Abel Caballero. «Ya no habrá ninguna ruptura temporal, de forma que continuarán con la actividad», valoró el regidor.
Este cambio obligará a cambiar la coordinación de los cuidadores de barrio, que, a partir del año que viene, se va a hacer desde el propio Ayuntamiento, concretamente desde la concejalía de Política Social. Será a través de las cinco unidades de trabajo social de este departamento municipal desde donde se coordine y otorgue una formación específica a los cuidadores.
Abel Caballero manifestó que lo que se pretende es poder ofrecer un mejor servicio, que ya cree que es bueno. «Funciona en la excelencia pero queremos una formación más específica de las personas que participen», valoró. En Vigo hay cinco unidades de trabajo social, que se encuentran dispersas por la ciudad: en la plaza de la Princesa, en Teis, Rivera Atienza, Coia y en la propia casa consistorial. Estas oficinas serán las que atiendan el funcionamiento del sistema.
Presupuesto
El presupuesto municipal asciende a 540.000 euros para la contratación de 47 cuidadores de barrio que prestan servicio en el Casco Vello, Torrecedeira, Traviesas, Teis, Coia, Calvario y Bouzas. El gobierno municipal no descarta ampliarlo en el futuro para atender la demanda existente de personas mayores que viven solas y que necesitan de una ayuda para poder realizar sus tareas cotidianas más básicas.
Los usuarios más frecuentes se encuentran en el rango de edad de entre los 70 y los 100 años. Los cuidadores atendieron en el último año a 35 personas de más de 90 años. El grueso de los beneficiarios tienen entre 70 y 80 años y también hay personas más jóvenes que necesitan de este servicio.
Por el momento, se verá interrumpido hasta que entre el funcionamiento el nuevo sistema anunciado ayer por el alcalde. El contrato finalizará el 31 de octubre. Por última vez, cientos de mayores de la ciudad se quedarán temporalmente sin este programa que se ha convertido en una ayuda imprescindibles para su vida diaria.
Los cambios anunciados ayer por el alcalde van en la línea de la propuesta realizada este mes por Marea de Vigo. La concejala Oriana Méndez abogó por que exista una continuidad a lo largo de todo el año y que además el programa se gestione directamente desde los servicios sociales.
Entre las tareas de los cuidadores, figuran el acompañamiento a citas médicas, a la farmacia, el banco, ayudas con la medicación y, en general, recados para resolver asuntos de primera necesidad o trámites en las administraciones que les resultan farragosas.