
El arquitecto Alfonso Penela critica el «desastre» que supuso la expansión del campus tras la facultad de 1991
28 sep 2021 . Actualizado a las 05:00 h.El edificio de la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales de la Universidad de Vigo cumple treinta años de servicio público y, para conmemorar la fecha, ayer tuvo lugar un acto académico en sus instalaciones en el que también se inauguró un mural realizado por el artista Marcos Míguez Puhinger.
Manuel Varela, primer decano de la facultad recordó que la Facultad de Ciencias Económicas y Empresariales comenzó su actividad en mayo de 1987, cuando aún estaba integrada en la Universidad de Santiago de Compostela y estos estudios formaban parte de las atribuciones académicas del Colegio Universitario (Cuvi). Las instalaciones era «manifestamente insuficientes». Fue cuando se planificó el nuevo edificio. De los 16 proyectos presentados fue seleccionada la propuesta firmada por el arquitecto Alfonso Penela. Según recordó Manuel Varela, el arquitecto vigués recogió las necesidades y preocupaciones del equipo decanal, que incluían la expansión del centro, concretada en la dotación de una biblioteca, salón de grados y actos. El primer decano apuntó que entonces ya destacó Penela por dónde podría ir la solución futura para las nuevas piezas estructurales, y que se concretarían en dos fases sucesivas.
Críticas de Penela
Tras señalar que este proyecto fue una de sus primeras obras importantes, el arquitecto Alfonso Penela recordó que se comenzó «facendo un claro no bosque e utilizando unha plomada e un metro» siguiendo la idea de lugar de unión donde confluyeran alumnado y docentes. En su intervención, el arquitecto destacó la división que se realizó del bosque «que era cuarta fachada do edificio», y se refirió a unas aulas «tipoloxicamente novidosas porque todas se unían dous a dous e incluso tres a tres, cunha rúa única que ía á aula que sube e á que baixa e crea a posibilidade de atoparse». Penela criticó, sin embargo, la posterior expansión del campus: «Logo empezou o desastre, empezáronse a construír edificios polo monte, como se fosen vivendas particulares. Cando xurdiu a intención de conectar empezaron os problemas porque había decanos que non querían quitar a valla metálica que os delimitaba e iso non favorecía o desexo de construír un verdadeiro campus».
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, que fue profesor en esta facultad se refirió al inmoble como «un edificio moi notable e unha referencia na arquitectura porque flota no aire. O sol vive aquí dentro, a luz vive aquí dentro».
El rector, Manuel Reigosa, cerró el acto conmemorativo con un mensaje de futuro en el que advirtió que «non teremos o número tan impresionante de estudantes que tivemos», y en el que el centro de investigación Ecobas debe enfrentar el reto de que se le compare con los mejores de Galicia y del Estado. «Tócanos sementar para o futuro», dijo el rector vigués, que también aseguró que «podemos estar satisfeitos polo pasado».