Fernández-Tapias: «Caballero tocó techo, llega el cambio»

J. R. VIGO / LA VOZ

VIGO CIUDAD

M.MORALEJO

El PP recupera 5.000 votos, un concejal y la ilusión en una noche electoral marcada por el regreso a la Diputación

29 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

La militancia del Partido Popular volvió a sonreír, a abrazarse por unos resultados electorales, a ver la luz al final del túnel cimentado por la sucesión de mayorías absolutas del alcalde Abel Caballero. La candidata, Marta Fernández-Tapias, se hizo ayer de rogar en su comparecencia. Irrumpió en el salón del hotel elegido para la noche electoral poco antes de las once de la noche, con el escrutinio por encima del 95 % hacía más de una hora. A esa hora, en el ambiente, conscientes de los militantes de la misión imposible que supone sentarse en el sillón de la alcaldía, emergía cada vez con más fuerza la posibilidad de recuperar la Diputación de Pontevedra, perdida hace cuatro años.

Pero Fernández-Tapias pasó por alto esa posibilidad, también rechazó responder a preguntas de los periodistas. Se limitó a seguir el guion impreso, apuntalado en un subida de 5.000 votos y un concejal, pasando de cuatro a cinco: «Hemos puesto las bases cambio en la ciudad. Analizamos los resultados y crecimos un 35% respecto al 2019. Ganamos más de 5.000 votos y un edil. Estamos ante un punto de inflexión, está ahí, y seguiremos creciendo. Se abre un nuevo ciclo. Caballero ha tocado techo, ha bajado siete puntos».

La conjunción de las palabras Caballero, bajado y siete puntos encendió a la militancia en el salón. Aplausos y más aplausos para homenajear a la candidata, que siguió su discurso: «Asumimos la mejora con tímida satisfacción. Hemos avanzado, pero nos queda un largo camino por delante. Esto lo hemos conseguido en algo menos de un año y medio de trabajo. Si seguimos más tiempo, a ver adónde llegamos... hay que sumar más apoyos, más y más en la ciudad hasta llegar al cambio real que Vigo necesita». Fernández-Tapias calló, el discurso llegó al final, pero de haber querido seguir, tampoco hubiera podido. El público, entregado, la vitoreaba: «¡Marta! ¡Marta! ¡Marta! ¡Marta! ¡Presidenta! ¡Presidenta! ¡Presidenta!».

Entre el público entregado había militantes de siempre, de los denominados históricos, como el exalcalde Manuel Pérez, jefes de distrito, pero también alguna ausencia difícil de pasar por alto: faltaba Corina Porro, cuyo vacío cubrió Javier Guerra, aspirante dos veces a presidente local del PP y en ambas ocasiones perdedor; la última, contra Fernández-Tapias. También estaba el conselleiro de Educación, Julio García Comesaña, José Ramón Lete (secretario xeral de Deporte), Alfonso Marnotes (portavoz del grupo municipal del PP) o Miguel Fidalgo, incansable.

Pero la ilusión por la mejora de los resultados electorales mutó en euforia poco antes de la medianoche. La alegría contenida se desbordó al confirmarse, internamente, que el Partido Popular recupera la Diputación de Pontevedra. Y no pocos, entre los asistentes, situaban como aspirante del PP para revelar a la socialista a Carmela Silva a la alcaldable Fernández-Tapias. Pudo ser producto de la euforia, o no. La dirección del partido lo decidirá. Lo único seguro es que ayer, al finalizar el recuentro, el PP de Vigo recuperó la alegría perdida hace cuatro años, acrecentada por la subida en otros ayuntamientos del área de Vigo que motivan el cambio en la provincia.