Fallece Ramón Díaz del Río, conselleiro de Pesca y de Industria en el primer Gobierno autonómico de la Xunta de Galicia

Ramón Díaz del Río Jaúdenes falleció este lunes a los 82 años. Apartado de la vida política desde hace años, fue el conselleiro de Pesca en el primer Gobierno electo de la Xunta de Galicia en 1982, presidido por Fernández Albor y posteriormente ocupó el departamento de Industria.

Díaz del Río nació en Vigo el 11 de diciembre de 1940. Cursó el bachillerato en los maristas e inició estudios de guardiamarina en la Escuela Naval Militar, que abandonó para hacerse ingeniero naval. Casado y padre de tres hijos varones, inició su carrera profesional como jefe de reparaciones el astillero Hijos de J. Barreras. Allí se fajó cuatro años, coincidiendo con un momento de expansión de la flota pesquera. «Mi experiencia en Barreras me sirvió para dos cosas: el ejercicio de mi profesión y el conocimiento de todo lo relacionado con el sector pesquero. Después de la reparación del Cabo San Roque, realizada en fecha fija, fui llamado como subdirector de una empresa pesquera que entonces iniciaba su expansión, Sapiga, Sociedad Anónima Pesquera Industrial Gallega. Ese fue mi primer contacto con el mundo de la pesca», explicó en una entrevista con La Voz.

En esa etapa embarcó en distintos buques de la empresa que faenaban en diferentes caladeros desde Sudráfica a Terranova. «Esta experiencia y el contacto directo con los marineros fue definitivo para que yo comprendiera cómo era la pesca por dentro. Lo recuerdo como algo muy formativo y muy duro. Ahí comprendí que los buques precisaban unas condiciones de habitabilidad hasta entonces apenas consideradas. Los mejores buques que se hicieron a partir de entonces introdujeron unas mejoras no ensayadas», recordaba.

Díaz ascendió a director general de Sapiga, lo que le obligó a realizar múltiples viajes a diferentes a Sudamérica. Compaginó el cargo con la dirección de una empresa atunera. En 1982, sin ningún tipo de experiencia política, fue llamado por Fernández Albor para desempeñar el cargo de conselleiro de Pesca, en un periodo con todo tipo de carencias y falta de medios y competencias.

Cesó en la crisis de gobierno de 1983, en la que desapareció la Consellería de Pesca, pero volvió a ser llamado por Albor a los seis meses para hacerse cargo de la Consellería de Industria, Energía y Comercio. Fue en los duros años de la reconversión naval y le tocó estar cada dos por tres en el despacho del ministro socialista Carlos Solchaga. También coincidió con los años de expansión de la moda gallega. «Estuve entre el hierro y la seda», llegó a bromear.

En 1985, Ramón Díaz del Rio fue elegido presidente del comité local de Alianza Popular. Le ganó la batalla a Carlos Mantilla, pero fue este quien se convirtió en candidato a la alcaldía dos años después por decisión de Mariano Rajoy, entonces presidente provincial del partido, que apeló a las encuestas desfavorables para el cambio. Fue una de las mayores desilusiones de su vida, ya que siempre confesó que le hubiese encantado ser alcalde de la ciudad. Díaz del Rio pasó a ser diputado en el Parlamento de Galicia y después, eurodiputado, del 87 al 89.

Tras esos años ejerció como asesor de empresas y en 1996 fue nombrado gerente de la Fundación Provigo, desde la que abogó por crear una masa crítica y servir de lugar de encuentro para las principales instituciones y empresas de la ciudad. Ramón Díaz del Río era un hombre culto, ávido lector y aficionado al ajedrez. Su cuerpo será incinerado mañana, en la intimidad familiar. A las seis de la tarde se celebrará su funeral en la iglesia de Santiago de Vigo.

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