Se fundó hace tres años y se implantó en la ciudad hace un mes, tras un contacto previo en Navidad; se hizo viral entre los jóvenes y ahora es una firma familiar
17 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Hace apenas un mes que la marca gallega Cero de Costa llegó a Vigo y ya ha encandilado a jóvenes y adultos. La firma de origen coruñés, que nació hace tres años, se hizo viral gracias a sus sudaderas de colores vivos y tonos flúor, en las que se pueden leer los nombres de las playas más famosas del litoral gallego. Además, han dado el salto a otros lugares como Madrid, con los nombres de sus zonas universitarias, o al interior gallego, con rutas relacionadas con el Camino de Santiago. Ahora ya están disponibles las prendas con las playas más famosas de Vigo y alrededores en el centro de la ciudad.
Cero de Costa aterrizó en Vigo en Navidades, a través de un pop-up (tienda itinerante) y tuvo una gran acogida. «Ahí nos dimos cuenta de que una tienda en la ciudad podía funcionar», explica la encargada del establecimiento en Vigo, Montse Juncal. Ella ya había trabajado en la tienda que tienen en Pontevedra y desde que el pasado mes de junio abrieron sus puertas en las galerías de la Puerta de Príncipe, asegura que no paran «de recibir clientas».
El surf ha sido su fuente de inspiración y fue este deporte el que dio nombre a la marca, ya que Cero de Costa hace referencia a la frase «a cero metros del mar».
«Es una marca ligada al mar, empezamos con dibujos estampados que representaban el surf pero fue evolucionando. Al principio los surfistas nos pedían ver el nombre de su playa favorita en las sudaderas y acabamos poniendo muchas más, se practique surf o no», explica Susana Martínez, una de las fundadoras.
Aunque en el inicio el público mayoritario eran chicas adolescentes, a día de hoy se consideran una marca familiar: «Vienen madres y padres con sus hijos y al final acaban comprando para todos, porque además somos una marca unisex», explica Juncal.
La producción, que se realiza en Galicia y Portugal, es constante y cada diez o doce días la tienda recibe nuevas prendas.
La marca no solo se ha quedado en la venta de sudaderas. En la tienda también se pueden comprar otros productos que están en su página web: vestidos, bolsas, fragancias propias para hombre y para mujer, camisetas, además de elementos de decoración o menaje.
La marca colabora también con otras gallegas como Ancar&me, una firma de bisutería artesanal cuyos productos también se pueden encontrar en la tienda física de Vigo. Aunque su catálogo ya es más amplio, y esperan seguir aumentándolo, su producto estrella son las sudaderas y el precio del modelo clásico es de 60 euros. El de verano se puede comprar a partir de los 26 euros y otro tipo de productos como las camisetas están disponibles a partir de 16 euros.
Como en casa
«Creo que nos diferencia el trato cercano con los clientes. Muchos nombres de playas, que tal vez no son tan conocidas para el público general y que hemos ido añadiendo, los incorporamos gracias a escuchar a chicas que nos lo pedían en la tienda por ejemplo», cuenta Montse, «por eso cada vez el producto es mejor. Muchas niñas que vienen a la tienda ya nos conocen por las redes sociales porque somos muy activas y cuando entran por la puerta ya me reconocen. Intento leer todo lo que nos proponen y tratar de responderles. Eso hace que aquí se sientan como en casa».
Uno de los aspectos que creen que es clave en la expansión de la marca es el haber conseguido que la gente se identifique con ella, «ver que las playas de tu zona están en una sudadera hace ilusión», dice, «una señora que veraneó toda la vida con sus amigas en la playa de Fuchiños, cuando vio escrito el nombre se llevó camisetas para todas».
Lo que le parece más importante es que «a la gente ver su playa o su zona representada le potencia su sentido de pertenencia y de identidad», cuenta, «además de que dicen que aquí dentro siempre huele a verano».
En Vigo tienen su propia tienda pero también están presentes en otros establecimientos multimarca ubicados en Baiona y Sanxenxo.
Su logotipo son las iniciales de la marca alargadas, que simbolizan las olas del mar. Además, tienen un segundo dibujo, un cero abierto y alargado que representa un «tubo», un tipo de ola que traspasan los surfistas.
Aunque les sorprendió la acogida aquí, su objetivo ahora es seguir presentes en Vigo y crear un negocio que sea reconocible en la ciudad.