
UNA HISTORIA REAL DE NOVELA Reactivar la pasión fue lo que llevó a Clara y a Esteban a separarse, cambiar de amigos, de trabajo y ver si podían volver a enamorarse. Al experimento lo han llamado sexistencialismo. Todo un fenómeno en las librerías
14 feb 2015 . Actualizado a las 10:26 h.Reactivar la pasión del primer día es posible. Clara Blanco y Esteban Mancal nos ofrecen su fórmula personal para combatir el aburrimiento y la rutina: el sexistencialismo. Esta historia contada en forma de chat es la primera novela erótica que se puede leer en pareja. A dos voces. ¿Nos atrevemos? Pues vete buscando compañero. Olvídate de cupido y apúntate al amor on line. El romanticismo y el erotismo cabalgan en Internet.
«Hace dos años decidí cambiar de identidad como mecanismo para llevar a cabo una investigación sobre la pérdida de la pasión que se produce con el tiempo en las parejas. Durante año y medio llevé una doble vida, me hice pasar por otra mujer, cambié de amigos y de trabajo, del mismo modo, le pedí a mi compañero que hiciera lo mismo, nos volvimos a reencontrar como desconocidos, y me volví a enamorar. En este viaje extraño y maravilloso descubrí muchas cosas sobre el funcionamiento del amor, la pasión y los deseos ocultos. Ahora cuento en mi novela Sexistencialismo cómo sucedió todo. Se trata de una historia fuerte, como suele ser la vida, una historia que trata sobre la búsqueda de la identidad y de la libertad sexual», así lo explica Clara Blanco, seudónimo bajo el que se oculta la actriz que ha protagonizado, junto a su compañero, también actor, Esteban Mancal, esta historia intensa y verdadera.
UN ATREVIMIENTO
El libro Sexistencialismo es el resultado de un atrevimiento, un atreverse a enfrentarse a algunos miedos, a la rutina, a la comodidad, y dedicarse por entero dos años a llevarle la contraria a la corriente del día a día. «En esta novela desvelamos parte de nuestra experiencia y de nuestra evolución hacia una vida más intensa y mucho más pasional».
En este proceso de cambio Clara y Esteban encontraron algunas claves que les han cambiado la vida. «No podemos enumerarlas como una receta, pero si podemos, a través de nuestra historia, tratar de ser un referente que pueda inspirar a otra parejas a relacionarse mejor. Al final las claves se encuentran a alcance de todos, el secreto real está en atreverse a vivirlo».
En el libro la pareja utiliza el chat de Internet para volver a encontrarse, para enamorarse. Pero
antes de vivir esta experiencia ambos tenían ciertos prejuicios con las relaciones que empiezan a través de la red. «Ahora en cambio nos parece una forma muy íntima de conocer a alguien, porque el chat requiere de sus tiempos para tomar confianza, hay que abrirse y entregarse mucho para que la otra persona llegue a confiar en ti, y sobre todo, uno a través de un chat se atreve a escribir cosas que nunca diría de palabra, son como las cartas de antaño».
Este anonimato se traduce en una sinceridad que llama a cada cosa por su nombre sin miedo a las palabras, de ahí que los autores prefieran presentarse protegidos con el velo del seudónimo. «Se trata de una exposición tan grande, un abrirse hacia fuera de tal manera, que es casi inevitable sentir pudor. Preferimos preservar nuestra identidad, y que cada lector pueda imaginar quién y cómo son Clara y Esteban. Las redes son un gran escaparate, y la intimidad parece que está destinada a la desaparición, pero en realidad en las redes cada uno expone lo que quiere de sí mismo. Este libro en cambio no fue escrito para ser leído, por eso es más íntimo, si alguna vez hubiéramos pensando en publicarlo no hubiera sido tan honesto».
En plena efervescencia de 50 sombras de Grey y el estreno de su película son muchos los autores que han pretendido subirse a la ola del erotismo. Clara y Esteban se desmarcan de esta tendencia alegando que su estilo, la novela se presenta en formato de conversación de chat, no tiene nada que ver. Además apuntan que Sexistencialismo se escribió antes de que el gran fenómeno de Grey se hiciera con el mundo de la literatura erótica. «Solo hemos coincido en el tiempo, y nos parece fabuloso, porque a la gente se le ha despertado el gusto por la erótica, y en Sexistencialismo la van a encontrar».
Si hablamos de feminismo y sexo es Clara la que toma la palabra: «el feminismo ha permitido a la mujer relacionarse con su sexualidad desde un lugar más sano, fuera de la culpa y los estereotipos. Es cierto que en Sexistencialismo Clara muestra un lado más sumiso, pero no es porque hayamos querido fomentar ese punto, sino porque es el caso real de una mujer con ciertos gustos y referentes de los que a veces trata de huir, y en cambio otras veces disfruta enormemente jugando a llevarlos al máximo. Por suerte, tuve la ocasión de encontrar una persona dispuesta a guiarme hacia otras maneras de amar, y con mucha intuición y también algo temerosa, me lancé a vivir. Lo importante es que he aprendido tanto, que poco a poco le he dado la vuelta, creo que lo dice todo mi última frase del libro».
A ambos les encantaría que el libro sirviera para que nos atreviéramos «a jugar, porque la vida con un poco de riesgo es muy divertida».