Anxo Pérez, fundador de 8Belts: «Puedo hablar con fluidez en 9 idiomas»

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El empresario fisterrán sorprendió en el 2011 con un método revolucionario para aprender chino. Doce años después, compagina esta labor con la de mentor, y da conferencias por todo el mundo hablando del éxito interior que permite triunfar

07 jul 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

“En el siglo XXI no tiene sentido ser monolingüe, si no sabes inglés, estás perdiendo dinero». Lo dice Anxo Pérez, fisterrán que habla con fluidez nueve idiomas y que en el año 2011 dio con una metodología revolucionaria para el aprendizaje de las lenguas. Lo ideó para el chino mandarín y montó una empresa llamada 8Belts con la que a día de hoy pueden aprenderse además inglés, francés o alemán en ocho meses.

Doce años después de fundarla, miles de personas han conseguido dominar alguno de estos cuatro idiomas, «desde niños de 6 años hasta una mujer de 97 años». Pero, además, su figura ha ido mucho mas lejos que su propia empresa: este emprendedor gallego ha escrito varios libros en los que ofrece claves sobre cómo alcanzar el éxito, es contratado por grandes empresarios y da conferencias motivadoras por todo el mundo: con su mensaje inspira y motiva a la acción, haciéndolos conscientes de que una parte enorme de su potencial se desaprovecha. América Latina, Marruecos, Portugal, Kazajistán o Italia son algunos de los últimos países que ha visitado. Al principio les hablaba de cómo alcanzar el éxito exterior, pero ahora está convencido de que lo esencial es partir desde dentro, que es el éxito interior el que hace triunfar a las personas.

—¿Cómo ha evolucionado 8Belts en estos doce años?

—Ha sido un camino muy bonito, muy duro, pero muy bonito. Hemos tenido tropiezos y cometido errores, pero de todo eso hemos aprendido. Sigo convencido de que nuestro mayor acierto es la metodología y en ese sentido no hemos cambiado nada: conseguimos que cualquier persona aprenda a hablar alguno de los cuatro idiomas que ofrecemos con fluidez. Funciona en el cien por cien de los casos, eso sí, requiere un compromiso del cliente, nosotros no hacemos milagros. Pero en el caso del inglés, por ejemplo, hemos dado esperanza a muchos alumnos que habían tirado la toalla después de intentar aprender inglés de otras muchas maneras. 

—¿Son los idiomas la asignatura pendiente de los españoles?

—En el siglo XXI no tiene sentido ser monolingüe, en el ámbito profesional, si no sabes inglés, estás perdiendo dinero, por no hablar de la comunicación entre las personas. No es lo mismo hablar a través de un intérprete que poder comunicarte de tú a tú, los idiomas acercan a las personas. Yo lo noto cuando doy conferencias por el mundo, al hacerlo en portugués, en italiano o en francés conecto más con las personas a las que me dirijo. Hace poco acogimos a un niño ucraniano en casa y el hecho de saber ruso me permitió poder comunicarme mucho mejor con él. Es increíble lo que pueden hacer los idiomas.

—¿Cuántas lenguas hablas en la actualidad?

—Puedo hablar en nueve idiomas con total fluidez, y tengo conocimientos de otros cuatro más. El último que estoy aprendiendo es el hebreo.

—¿Cuál es la clave de vuestro método?

—Lo importante fue descubrir la forma en la que funciona el cerebro a la hora de aprender un idioma, y tengo claro que la clave está en simplificar, se aprende más rápido con menos. Y eso es lo que hace 8Belts. Pero no solo con los idiomas, se puede aplicar a todos los aprendizajes de la vida, a la música por ejemplo. Ideé un curso de cómo aprender mil canciones al piano en una hora y fue posible.

—¿Y vale para cualquiera?

—Está pensado para personas desde los 6 años en adelante, hasta hemos enseñado inglés a una mujer de 97 años. Pedimos un compromiso de 30 minutos al día y, si el alumno lo cumple y en 8 meses no consigue hablar en ese idioma, le devolvemos el dinero. Al principio era difícil que nos creyeran, pero después de todos estos años ya hemos demostrado que es posible.

—Y además te ha permitido recorrer el mundo hablando del éxito de este método. ¿Cómo ha cambiado tu vida en todos estos años?

—Ha cambiado un montón, soy una persona totalmente diferente. Tras el éxito de 8Belts, decidí compartir una serie de mensajes, lecciones que escuchaba mientras la vida me hablaba. Descarté más de mil y me quedé con las 88 más rompedoras para triunfar en la vida y en la empresa. De ahí salió el libro Los 88 peldaños del éxito que, a los 50 días de publicación, ya era el más vendido en España. Pero el punto de inflexión fue el año 2018; entonces tuve una transformación interior de la que salió mi cuarto libro. Fue como un cambio radical. Me pasaba el día dando conferencias sobre cómo lograr el éxito exterior y entonces me di cuenta de que lo realmente importante estaba dentro, era el éxito interior.

—¿Cómo cambió tu discurso?

—Antes me dedicaba más a hablar de mis éxitos, de todo lo que había logrado, pero me di cuenta de que inspira mucho más hablar también de los errores cometidos, de los fracasos y de cómo se fueron superando, para enseñar así a gestionar los reveses y lograr el éxito. Creo que ese crecimiento interior es el que te mantiene humilde, más alerta para gestionar las crisis que vienen de otra manera.

—Ofreces mentorías a grandes empresarios, ¿qué buscan esas personas que acceden a este servicio?

—Suelen ser empresarios a los que yo denomino «conscientes», que no comenten el error que yo cometí cuando empecé: ellos saben que el crecimiento tiene que ir desde dentro hacia fuera. Si intentas emprender y lo haces con falta de integridad, con miedo o con inseguridad, te será más difícil alcanzar tus objetivos. El miedo es el mayor lastre del desarrollo personal, laboral y económico. Si actúas desde el miedo, solo encontrarás peligros; desde el amor solo encontrarás oportunidades.

—¿Y cómo se puede hacer para perder esos miedos?

—Lo importante es tomar conciencia de tus miedos, del punto de vista desde el que vendes un producto o un servicio. Acciones como hacer 50 respiraciones limpias y dejar la mente en blanco ante de tomar una decisión ayudan a ver las cosas de otra manera. Desde ese crecimiento interior es desde donde sube el nivel de conciencia. Para mí, todo esto importaba muy poco hace cinco años, me reía de los que hacían estos cursos y ahora esta filosofía es el centro de mi vida.

—Das conferencias en muchas multinacionales. ¿Percibes mucha desmotivación en el mundo laboral?

—No creo en la mentalidad derrotista, creo que hay dos tipos de actitud: la que va del miedo hacia lo que detestas, y la que va por amor hacia lo que buscas. Cuando actúas desde el miedo solo vas a encontrar peligros, si lo haces desde el amor siempre encontrarás oportunidades, siempre habrá cosas que celebrar. En mis conferencias les hablo del crecimiento exterior ligado al crecimiento interior porque cuando resuelves las cosas por dentro terminas resolviéndolas también por fuera. Por ejemplo, está comprobado que los comerciales que se sienten felices con su vida venden casi un 40 % más que los que no lo están.

—¿Cuál es el objetivo en estas sesiones?

—Mi objetivo es crear un clic mental en la gente; que las personas que me escuchan consigan tomar mejores decisiones. El emprendedor de hoy en día tiene que estar a la última y lo cierto es que el mundo va demasiado rápido. Y hay que tener en cuenta que los líderes del siglo pasado no son como los del siglo XXI. Antes, cuando alguien cometía un error, se daban las críticas en público y los aplausos en privado; ahora es al revés: el reconocimiento lo debe ver todo el mundo y los errores solo los debe saber quien los comete, para poner los medios y que no se vuelvan a repetir.

—¿Qué respuesta recibes de la gente que te escucha?

—Recibo mucha inspiración, pero siempre desde la humildad, consciente de que sigo teniendo muchas cosas que aprender. Agradezco los piropos, pero todos tenemos talento, virtudes y defectos por igual.