El postre parisino creado por Stéphane Louvard une el cruasán con masa de galleta y tras hacerse virales en TikTok, ya se pueden degustar en varios locales gallegos
03 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Tienen la mezcla perfecta. Esto es en lo que coinciden todos los chefs de los distintos obradores de Galicia sobre los «crookies», el famoso postre que triunfa en las redes sociales y que ya preparan en sus hornos. Hablamos con ellos para que nos cuenten el secreto de una buena elaboración y los productos que ofrecen.
Gazteka, Santiago de Compostela
Rebeca Fernández, encargada del área de repostería del Gazteka, había visto muchas tendencias de repostería, pero se decantó por este dulce porque la galleta es uno de los productos protagonistas. «Lo que nos distingue es que dentro de cada ‘crookie’ ponemos un núcleo que lo hace muy cremoso», explica. En su caso, no querían lanzar un producto solo por moda, por lo que estuvieron semanas haciendo pruebas. A partir del 1 de julio tendrán en su establecimiento el «crookie» sabor Lotus.
Pastelería Biquiños, Ferrol
Después de descubrir vídeos en TikTok, a Lorena Ameneiro y a su socia, Christelle Vilariño, se les ocurrió probar a elaborarlos. Ahora son un éxito y se los quitan de las manos en su pastelería de Ferrol. «A los clientes les encantan y repiten. Se los llevan para picotear cuando van a casa de alguien o a eventos», explica Lorena. Además, la artesana cree que no van a pasar de moda. «Estos se quedan», asegura.
Break Time, Carballo
Kendur Sliwka y Luiza de Sliwka regentan este obrador carballés que se caracteriza por ofrecer productos recién horneados. «Nuestra vitrina es casi del mismo tamaño que nuestro horno», explica Kendur. Decidieron probar en el mundo de los crookies, después de ver noticias en redes sociales y confirmar que les encajaban con su modelo de negocio. «Yo al principio creía que el postre no iba a pasar de moda, pero ahora pienso que va a depender de la innovación que se haga con ellos», indica.
Mesturas, Vigo
En este local del barrio de Coia no dieron abasto cuando los crookies comenzaron a hacerse populares. «Al principio, hacíamos la masa de los cruasanes aquí en el obrador, pero después del bum vimos que era muchísimo trabajo. Yo estaba sola y desbordada, así que ahora los compramos y les metemos las ‘cookies’, explica Patricia Martins. Antes de iniciarse en este mundo, buscó información sobre el creador de este postre en redes sociales y después se puso manos a la masa. Además de ofrecer los sabores más repetidos, también elaboran uno con crema de Kinder Bueno. «Es el que más se vende, junto a la de pistacho», afirma.
Habaziro, A Coruña
«El secreto de un buen ‘crookie’ es que el cruasán sea artesano para que se pueda manipular bien y una galleta que tenga una buena estructura y no sea muy grasienta», explica Pablo Morales, chef del obrador. Los que más se venden son los originales de chocolate y los de pistacho, este último realizado con menos grasa para equilibrar el sabor entre el fruto seco, el chocolate y la masa del cruasán. «La mezcla de sabores queda muy interesante», dice sobre el crookie. Se lanzaron a prepararlos después de estudiar las tendencias gastronómicas del momento. «La mezcla entre el cruasán y la galleta da mucho juego», afirma Pablo.
Lambeteiros, Ourense
Puy Iglesias, la artesana de esta tienda, los vio en algunas cuentas de Instagram y decidió comenzar a hacerlos. «Me han dicho que son los primeros que hay en Ourense y la verdad es que la gente pregunta mucho por ellos», afirma. En este local, además de poder degustar por encargo el crookie original de chocolate, también ofrecen alternativas de otros sabores como el de galleta Lotus, Oreo o crema de pistacho.