Patricia García: «No es bueno empezar el curso ni improvisando ni con la agenda llena de cosas que hacer»

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Patricia García es la fundadora del hogar educativo Trazos Class, de Redondela.
Patricia García es la fundadora del hogar educativo Trazos Class, de Redondela. XOÁN CARLOS GIL

«Ayuda contarles a los niños cómo funciona el curso escolar por meses, con un calendario», apunta esta maestra y psicopedagoga que convierte cada verano Redondela en centro del aprendizaje creativo, reuniendo a profes de toda España

06 sep 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El curso es largo, y el pensamiento creativo, un eficaz aliado para llevarlo a tramos, día a día, semana a semana, mes a mes. Así por peldaños piensa, e invita a empezar el curso, Patricia García, emprendedora, fundadora del hogar educativo Trazos Class, que cumple diez años con las ganas de aprender por bandera y ha convertido Redondela, por cuarto verano consecutivo, en una escuela de verano para profes. 

1 ¿Cómo hay que empezar el curso?

Como si fuera el primer día de cole de tu vida. Cada curso tiene que ser una oportunidad para aprender, debe estar esa ilusión del primer día. Hay que transmitírselo a los niños en casa, como familia, y en el aula. Como docentes, también debemos ver el inicio de curso como un primer año, no como un año más.

2 ¿Una pauta para ponerle esa ilusión?

No dejarlo todo a la improvisación. Improvisar es un saber importante, pero hay que tener la técnica dominada. Tanto desde casa como como docentes, tiene que haber organización y planificación. Cómo vas a organizar el tiempo, qué horas de la tarde destinarás al disfrute... No puede ser «empieza el cole y es una cárcel». Hay que dosificar, ir poco a poco. El inicio de curso no puede enfocarse como «se acaba todo el tiempo libre y adiós». Hay que hacer un planning con tiempos libres.

3¿Y los profes?

No puede ser tampoco «empieza el curso y llega la carga y ya no voy a tener tiempo para nada». Eso ocurre si no planificas. Deja tiempos para hacer yoga, ver una peli o lo que tú consideres. No podemos empezar el curso con las agendas llenas de todas las cosas que tenemos que hacer.

4¿La clave es planificar sin saturar?

Sí. Septiembre se va volando, hay que verlo a corto plazo. Hay que ir marcándoles tiempos cortos a los niños. A los niños es muy bueno contarles cómo funciona el curso escolar. Ayuda plasmarles cómo funciona el curso en un calendario. Les podemos explicar el curso por meses, combinando rutinas con días libres y actividades diferentes que podemos hacer. Explicar cómo funciona un curso a los niños les ayuda a verlo por fases, y no como ese todo que se hace eterno. Porque ellos cuando son pequeños no son capaces de ver las cosas como un todo, tienen que verlas pieza a pieza. Hay que explicarles bien ese equilibrio entre responsabilidad y esfuerzo y disfrute. Y esa planificación visual es de ayuda.

5 Conviertes Redondela cada verano en centro del aprendizaje creativo. ¿Qué tal como profe de profes este cuarto año?

Van cuatro veranos y cada año el éxito es mayor. Por lo que consiguen en esas formaciones los profes como equipo, como comunidad. Les unen las ganas de hacer cambios y de llevar al aula diferentes proyectos.

6Mérida, de «Brave» inspiró la última formación. ¿Qué tiene esta princesa de especial?

Mérida es un perfil distinto de princesa, muy rebelde, que lucha por su mano por la libertad. En la trama hay un villano que es un príncipe que por ser egoísta y pensar solo en él se quedó solo. La película permite hablar de la capacidad de sanar vínculos, de los roles de género, trabajar los juegos tradicionales. Todo desde ese pensamiento crítico y creativo.

7¿Qué te parece que Disney vete a los villanos?

Es un error vetar a los villanos. No hay que endulzarlo todo, porque la realidad es la que es. Me parece más oportuno ser capaz de mostrarlos a los niños dándoles las herramientas para enfrentarse a esos villanos. Existen, y es un error esconderlos.

8 ¿Una receta para empezar el curso?

Hacer un frasco de papeles con preguntas para los niños: qué esperan del curso, cómo creen que van a ser los compañeros, qué esperan... Algunas veces hay que darles un empujón para que piensen. Un frasco de preguntas, que vamos a contestar de modo imaginativo, y que iremos releyendo a medida que avance el curso. Vamos viendo si se cumple la expectativa, si no, si es mejor, si es peor... Esta es una manera de ayudarlos a ponerse en situación. Y más que que los niños se marquen objetivos a conseguir, a mí me gusta hablar de intenciones. Marcar a los niños una serie de intenciones es una buena forma de empezar el curso.