Son una especie de magos de las bicis, en pocas horas consiguen que niños y adultos pedaleen por sí mismos. «La mayoría lo consiguen en cuatro horas», asegura
28 oct 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Álex Voces sabe cómo hacer que la gente vaya sobre ruedas. Desde A Escola da Bici enseña a niños y mayores a andar en bici sin ruedines, algo que él considera contraproducente. «Hay que dejarlos cuanto antes, de un día para otro», señala Álex, que asegura que siguiendo la metodología que emplean en su centro en pocas horas se consigue el equilibrio dinámico que te sostiene sobre dos ruedas.
—¿En qué consiste el método «bikeability» que utilizáis en la escuela?
—Son una serie de pasos con los que tanto niños como adultos van ganando el equilibrio dinámico. Partimos de unos ejercicios en los que la persona tiene los pies en el suelo, como si estuviera utilizando una bici sin pedales, directamente se los quitamos o los plegamos. Al principio, dan unos pasos cortos, después zancadas más largas, y tiene que llegar un momento en el que deje los pies en el aire. Cuando los aguante entre dos y tres segundos, se le pone un pedal, y mantiene el otro en el aire hasta conseguir seis u ocho segundos, que ya vemos que está a punto de ganar el equilibrio dinámico, y le ponemos el segundo...
—¿Es clave en los niños utilizar bicis sin pedales cuando son muy pequeños?
—Sí, mucho. Algo que determina mucho a los niños que aprenden rápido o tardan un poco más es la experiencia con la bici sin pedales. Es muy bueno. Es algo que recomendamos, porque si ese niño con 2 o 3 años las usó, en el momento de pasar a una bici convencional aprende rapidísimo, mientras que el que no lo hizo o quien usó ruedines va a tener unas dificultades mucho mayores.
—¿Cuándo es buen momento para dar el salto de una a otra?
—No es tanto por una cuestión de edad, sino más bien por las habilidades que muestra el niño y cómo lo ves. Cuando en una bici sin pedales deja los pies en el aire durante 15-20 segundos es que está supercapacitado para ponerlos. Si va andando muy despacio o en ningún momento levanta los pies del suelo, aún no. Lo ideal sería que se fuese acostumbrando a dejarlos en el aire, que al final es como un juego para ellos, pero al mismo tiempo está construyendo unas habilidades increíbles para poder andar en bici a posteriori.
—¿Y cuando van con ruedines?
—Para nosotros los ruedines son el mal. No los aconsejamos para nada. Es totalmente contraproducente para ganar el equilibrio dinámico, porque al final es una situación de confort que no es real, que da igual lo que haga, porque los ruedines le van a estar reequilibrando, pero no está ganando equilibrio dinámico.
—¿Cuándo hay que quitarlos?
—Cuanto antes, aunque sea de un día para otro. Lo ideal sería quitarlos y bajar el sillín para que pueda tocar el suelo con los pies y empezar a hacer ejercicios parecidos a los de una bici sin pedales.
—¿A qué edad los niños van a vuestros cursos? ¿A los 2 años?
—De 2 años no hemos tenido nunca, no se nos ha planteado, y tampoco los llegaríamos a aceptar porque hay otras cuestiones, por ejemplo, de recibir órdenes, que a lo mejor es un proceso más complicado. Generalmente, tenemos de 4 a 8 años, de 5 y 6 es lo más habitual, pero de 8 a 11 también tenemos alguno, aunque es más raro.
—¿En cuánto tiempo lo consiguen?
—Para los niños tenemos cursos de cuatro horas, divididos en dos sesiones de dos horas cada una, y la mayoría aprenden en cuatro horas. Si alguien no lo consigue, le ofrecemos otras cuatro, y con dos cursos es rarísimo que no aprenda. Si tienen una experiencia previa de ir sin pedales, en la primera sesión ya aprenden.
—Sois magos de las bicis.
—Es la metodología, con los niños es supersencillo, e incluso con adultos, que puede parecer más complicado porque ya hay unos miedos. No es lo mismo el miedo que tiene a caerse una persona de 60 años que un niño de 5. Aun así, en los cursos de adultos, que son de seis horas, es muy raro que una persona no aprenda.