La magia de recibir el año enfocado en tus propósitos afirmándonos en nuestro potencial y en poder cambiar para atraer lo que suma a nuestra vida
31 dic 2024 . Actualizado a las 16:45 h.Cierro un 2024 que ha sido fantástico y un giro total, muy positivo en mi vida. En casa de mis padres hay un pozo donde cada 1 de enero lanzamos monedas y pedimos deseos. Si suena «chof» al caer al agua, buena señal. Todos se me han cumplido. El cambio de año nos vuelve a poner en el foco lo que queremos que sume. A veces, solo falta un empujoncito y los rituales, ¿por qué no?, pueden darlo si se practican con verdadera intención y la aspiración es realista. Cinco expertas en ellos sugieren varios para entrar en el 2025 con buen pie y decir cuando acabe: ¡Ahora sí!
Casandra de Juan (@blessing_indigo) propone el ritual del calendario, para el cual se necesita una agenda o calendario del 2025, flores secas (pétalos de rosa, albahaca, trébol u otra que guste), cuatro velas pequeñas de té, cerillas y cuarzo blanco. El proceso es el siguiente: «Primero abrimos el círculo de protección llamando a nuestros guías espirituales para que nos ayuden con esta manifestación. En el centro del lugar de trabajo ponemos el calendario o agenda, ya completo con todas nuestras manifestaciones (por meses). Encima, espolvoreamos las flores, y en medio, ponemos el cuarzo. Después, se colocan las cuatro velas al lado de la agenda (en cada esquina sin tocarla pero cerca) y se encienden. Con mente libre de pensamientos se hace este decreto: “Que este año que viene sea bendecido con buena suerte, buena salud, éxito, abundancia y alegría”. Se puede completar con todo lo que uno quiera. Al consumirse las velas, damos las gracias. Recogemos los pétalos y los ofrendamos a la madre tierra, soplando a la naturaleza».
ABUNDANCIA CON CANELA
Carolina Carbajal (@kakogreenhome) explica cómo atraer la prosperidad y la abundancia, favorecer que las «buenas oportunidades lleguen con el nuevo año». «Se realiza el día 1 de enero —indica—, preferiblemente por la mañana. Se necesita canela en polvo». Así serían los pasos: «Primero se toma un puñadito de canela en polvo con la mano derecha y se vierte sobre la palma de la mano izquierda. Te colocas en la puerta de tu casa, de espaldas al exterior y mirando hacia el interior. Soplas la canela hacia dentro, visualizando cómo la prosperidad y la abundancia entran a tu hogar. Mientras soplas, decretas en voz alta: ”La abundancia y la prosperidad entran en mi hogar. El dinero, la alegría y las oportunidades fluyen hacia mí con facilidad. Gracias, gracias, gracias”».
«En mi familia —señala por otro lado Raquel Graña (@intimasconexiones)— hay varios rituales, pero hay uno que me gusta mucho que hacemos en Fin de Año. Tiene que ver con un lazo rojo que le pones a una persona y le haces tres nudos, no muy apretados. En cada uno de los nudos, la persona pide un deseo para ese año. Se tiene que poner antes de las doce de la noche. La pulsera se tiene que caer después de esa hora, porque se dice que así se cumple».
Carolina Geneiro (@osolyogaypilates) realiza un vision board o panel con sus intenciones y propósitos. Recomienda hacerlo con tiempo y ser claro y concreto: «Escribo los pasos a seguir. Después, busco imágenes que me hagan sentir la energía de lo que quiero manifestar (esto es muy importante porque nos conecta con cómo queremos que ese propósito nos haga sentir) y realizo con ellas un colaje, agregando frases, dibujos... Lo dejo donde pueda verlo cada día. Lo uso para visualizar en meditaciones o lo miro para recordar dónde y cómo estaré en poco tiempo».
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Yo aporto otro más. Papá Noel acaba de traerme el ritual japonés Daruma: se pinta el ojo derecho al Daruma (figura de cerámica), se coloca en un lugar visible, y si alcanzas tu meta, se pinta el segundo ojo. Se regala al final del año, como apoyo para que quien lo reciba alcance sus objetivos.