Jared Kushner, a por las 'Maldivas europeas'
Jared Kushner, a por las 'Maldivas europeas'
Viernes, 30 de Agosto 2024, 11:06h
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En un idílico rincón de la costa sur de Albania, cercano a la ciudad de Vlora, el yerno de Donald Trump, Jared Kushner, planea construir un complejo turístico en tierra protegida, una zona amada por los lugareños por sus tranquilos bosques de pinos, olivos y senderos y sus desiertas playas. Un paraje de ensueño en el sur del país, a la entrada del mar Adriático, que algunos han bautizado ya como las 'Maldivas de Europa'. Kushner, además, planea otros dos proyectos: uno en una isla albanesa cercana en Vlora y otro en un antiguo cuartel del Ejército en la capital de Serbia, Belgrado.
Aunque sus inversiones de hasta 1.000 millones de dólares podrían resultar atractivas para las economías locales, el exasesor de Trump ha encontrado a los lugareños en pie de guerra, que temen que todo acabe dañando el medioambiente. Y bien que les vendría el dinero, ya que, desde la caída del comunismo en 1990, Albania no deja de combatir una inestabilidad económica y política que empuja a sus jóvenes a emigrar.
Sus parajes alpinos y su costa intacta, lo saben, atraen a un creciente número de turistas, el cuarto mayor aumento a nivel mundial: en 2023 más de 10 millones de personas visitaron Albania, un 35 por ciento más que en 2022 y un 56 más que en 2019, según la Organización Mundial del Turismo. Pero no parecen estar dispuestos a todo por ello. Los turistas que el país recibe llegan principalmente en busca de nuevas opciones a los saturados destinos de Grecia y Croacia, y bien puede valerles que esas opciones sean más económicas... o más exclusivas, tranquilas y lujosas. Ese es el filón que el exasistente principal de Trump ha visto.
Pese a estas primeras protestas a sus proyectos, Kushner no parece muy preocupado: confía en que casi nada hay que no pueda resolverse con dinero...
Para muestras, un botón: él mismo presentó su plan de inversión justo unas semanas después de que el Parlamento de Albania cambiara una ley que permite ahora al Gobierno otorgar permisos de construcción de hoteles o complejos turísticos de cinco estrellas en áreas protegidas... Justito como los que Kushner planea y que pueden verse en la simulación realizada por su empresa de inversiones, Affinity Partners, en la imagen que abre este reportaje.
El plan de Kushner (que prometió no dañar el medio ambiente) proyecta muelles para yates, piscinas y exclusivas villas de lujo, con la finalidad, dijo, de convertir la ciudad de Vlora en un «destino turístico de alto nivel». Ermal Dredha, alcalde de la ciudad, abre los brazos al proyecto: «Sin inversión, ¿cómo atraeremos, si no, a todas esas personas que vienen a Albania y eligen Vlora?», se preguntó.
Muy cerca de allí, la península protegida de Zvërnec, una parte integral del ecosistema del río Vjosa, es otro de los deseos del yerno de Trump. La laguna de Narta, en el corazón del delta, es una zona clave de cría y alimentación para las aves más emblemáticas del sureste de Europa, como el pelícano ceñudo, los flamencos rosados y las espátulas, que encuentran en la laguna una de sus paradas más importantes para alcanzar el norte de Africa por la llamada ruta migratoria del Ariático.
Desde la ONG ambiental PPNEA no piensan igual y se preparan para lo peor: «Es una pena que esta zona ya no servirá a las próximas generaciones –asumen–. En diez años este será un lugar gris de cemento».
También en Serbia —donde el yernísimo busca financiar un proyecto de lujo en la antigua sede del Ejército Popular Yugoslavo hasta 1999, cuando la OTAN lo bombardeó durante una campaña aérea contra las atrocidades serbias en Kosovo— más de 26.000 personas han firmado en contra de los planes de Affinity. A saber, levantar un hotel, apartamentos, tiendas y espacios de oficinas en dos edificios que forman un sitio cultural protegido en el centro de Belgrado.
El tercer proyecto de Kushner pasa por la construcción de un complejo hotelero de lujo en la isla de Sazan, enclavado en un sector de la isla perteneciente al Parque Nacional Marino Karaburun-Sazan, reconocido por su importancia medioambiental y su biodiversidad desde 2010. De momento, algunos debates sobre su conveniencia ponen aún algo de suspense a sus planes, pero todo apunta a que, pese a las protestas de los albaneses de cada una de las regiones afectadas, el yerno de Donald Trump cambiará definitivamente el aspecto de este sector del Mediterráneo.