Viernes, 13 de Diciembre 2024, 10:33h
Tiempo de lectura: 7 min
Alguien ha calculado, nos cuenta un lector, la merma del PIB que más pronto que tarde nos traerá el hecho de que en sociedades como la nuestra apenas tengamos hijos. Hay otro impacto que ya empieza a verse, y que tiene que ver con la soledad que cada vez asedia a más personas. De ella, nos sugieren otros dos lectores, entre ellos el autor de la carta premiada, se nutre el individualismo airado que a diario vomita sus bilis en esas redes sociales que cada vez tienen más de maraña y menos de espacio para socializar. La intolerancia del siglo pasado se exasperó en la calle, donde los pescadores a río revuelto salían a aturdir a las masas. Hoy se riega y se distribuye por circuitos virtuales, y quienes la absorben y difunden son gente sola arrellanada en su sillón. No está claro que eso la haga más inofensiva.