La Voz de Galicia

Ángela Vela, veterinaria y experta en nutrición: «Nunca le daría pienso a un gato. Como le des, se volverá adicto»

Vivir A Coruña

Yago Gantes
Ángela Vela, veterinaria especialista en nutrición animal.

La comida húmeda es una alternativa mejor si no se quiere llevar a cabo una alimentación con productos no procesados

07 Dec 2024. Actualizado a las 20:43 h.

Alimentar con pienso a los gatos no suele dar tantos quebraderos de cabeza como a los perros, que siempre prefieren comer lo que se está preparando su humano. La razón está en que los felinos se vuelven adictos a este producto, un riesgo para el animal, sobre todo, si no bebe la suficiente agua. Lo explica en esta entrevista Ángela Vela, veterinaria y experta en nutrición. 

— ¿Por qué, a diferencia de los perros, los gatos comen tan bien el pienso?

— Los gatos comen muy bien el pienso porque se vuelven adictos. Los gatos son carnívoros estrictos y tienen un metabolismo diferente al perro en lo que tiene que ver con los carbohidratos, la glucosa y la insulina. Entonces, a los gatos el pienso les genera adicción. Por eso lo comen tan bien y por eso es muy difícil quitárselo.

— Entiendo que esa adicción es perjudicial.

— Sí, es una adicción mala. Realmente ellos deberían comer solo productos de origen animal y un cinco por ciento máximo de origen vegetal, y hablamos solo de frutas y verduras, nada de carbohidratos. No están diseñados para comer nada de carbohidratos. Entonces, al metabolizar diferente la glucosa, les genera unos picos que les producen mucha adicción. Las personas que tienen gatos saben que necesitan tener el cuenco lleno y les resulta muy complicado cambiarles el pienso a otro tipo de comida.

— Y, claro, los piensos tienen un alto contenido en carbohidratos.

— Todos los piensos para gatos tienen carbohidratos, aunque ahora están surgiendo muchas marcas también de comida natural sin carbohidratos.

— ¿Es posible revertir esa adicción y comenzar a alimentarlos con comida humana?

— Es complicado, pero no imposible. Lo que pasa es que hay que armarse de paciencia.

— ¿Cuándo acuden a su consulta para tratar de conseguir esos cambios en la alimentación?

— Normalmente son los tutores quienes quieren cambiar el tipo de alimentación cuando ven que su gato ya tiene una patología de tipo renal o digestiva. En esos casos, yo siempre les digo que lo mejor que se puede hacer es dar comida natural, pero hay que armarse de paciencia porque puede ser un proceso de hasta seis meses y complicado. Es como cualquier persona que quiere dejar de fumar. Igual al mes lo has conseguido, pero sigues teniendo esa necesidad. Entonces, lo que hace un gato es pedir pienso a todas horas y es una tortura para sus tutores. Es difícil, pero sí que se consigue.

— ¿La comida húmeda es mejor que el pienso?

— La comida húmeda es mucho mejor, aunque tenga carbohidratos, suelen tener menos. Además, la mayor parte de la gente lo asocia a comida más grasa o a premios, pero no es así. La gran ventaja de la comida húmeda es que tiene agua. Una de las grandes enfermedades que tienen los gatos es la insuficiencia renal y eso tiene que ver porque es un animal que no tiene instinto de beber agua. Entonces, si está comiendo toda la vida pienso, están en constante deshidratación durante toda su vida. Entonces, al principio no se nota, pero cuando es un animal de diez u once años, empiezan a fallarle los riñones. La comida húmeda puede paliar ese problema. No es perfecta, hay muchos tipos de comida húmeda, la hay buena y la hay mala, pero dentro de lo que cabe siempre lleva más agua.

— ¿Se puede dar comida humana a un gatito recién llegado a casa?

— Hacer un método de alimentación a un gato desde el principio es lo más fácil. Y la ventaja de los gatos es que comen crudo porque no son capaces de sintetizar un aminoácido, la taurina, que la necesitan en el alimento. Ese aminoácido está en la comida cruda. Entonces, lo que come un gato es carne cruda, vísceras crudas y se les puede dar algo de vegetales. Además, ahora se puede encontrar comida comercial con esta filosofía. Además, hay marcas de comida húmeda muy buenas, con un 95 % de origen animal y el resto vegetal. Yo nunca le daría pienso a un gato, porque como le des se volverá adicto.

— ¿Y se puede combinar comida humana con pienso, como se hace con los perros?

— Los gatos y perros son muy distintos. Lo asociamos a lo mismo, porque son animales de compañía, pero es como comparar un conejo con una serpiente a nivel de alimentación. El gato, si has comenzado a darle pienso, después le pones un poco de carne, te va a maullar todos los días hasta que le vuelvas a dar pienso, que es lo que quiere.

— ¿La idea de los gatos comiendo pescado es un mito o es cierta?

— Hay algunos gatos a los que sí les gusta el pescado. De hecho, tuve un gato en la clínica que solo conseguían darle comida natural cuando era pescado y marisco, solo comía eso. Pero realmente es un mito lo de los gatos y el pescado. Además, el pescado como dieta base no es idóneo, tiene una serie de compuestos que a largo plazo pueden causar problemas. No obstante, se les puede dar, por supuesto, pero eso sí, como en el caso de los humanos, hay que congelarlo previamente para eliminar parásitos.

— Una de las causas más importantes de muerte de los gatos está relacionada con la insuficiencia renal. ¿Se puede evitar o combatir con una buena alimentación?

— Ese tipo de muertes tiene mucha causa genética, pero en mi experiencia un animal que tiene predisposición a desarrollar un problema renal a largo plazo, puede que consiga evitarlo con una alimentación húmeda. De hecho, casi todas las marcas de pienso ya te ponen que siempre dejes agua a disposición del gato, que pongas muchas fuentes, bebederos, que intentes estimularlo a que beba agua.

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— Si los tutores no tienen tiempo para llevar a cabo una alimentación natural, ¿la mejor opción siempre es la húmeda?

— Sí, que sea comida húmeda siempre.


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