Hacia las nueve de la mañana de ayer, cerca de un centenar de agentes de la Policía Nacional, repartidos en tres grupos, entraban simultáneamente en los ayuntamientos de Cee, Mazaricos y Fisterra dentro de un operativo de lucha contra la corrupción dirigido por el titular del Juzgado número 2 de Corcubión, Andrés Lago Louro.
Los agentes entraron también en la vivienda de tres empresarios de la zona, Daniel Ogando y un hijo del mismo nombre, y Jorge López Lago. Lo hicieron también en los domicilios de algunos de los alcaldes, que fueron trasladados después hasta los ayuntamientos en coches camuflados de la Policía Nacional.
El alcalde de Cee, el independiente Ramón Vigo; el de Fisterra, José Manuel Traba, y el de Mazaricos, José Manuel Santos Maneiro -ambos del PP-, fueron detenidos y trasladados por la tarde a dependencias de la Policía Nacional en A Coruña, desde donde serán puestos a disposición judicial en las próximas horas. También fueron arrestados otros dos ediles populares de Fisterra, el de Urbanismo, Ramón Redonda, y el teniente de alcalde, Santiago Insua Esmorís-Recamán, así como los tres empresarios. Daniel Ogando es un conocido constructor de obra pública, y su hijo, el titular de Palcos Senande, una empresa de alquiler de escenarios. López Lago es representante de orquestas y fue detenido hace unos años por delitos relacionados con el tráfico de drogas.
Abundantes documentos
Dentro de la denominada operación Orquesta se registraron los tres ayuntamientos, los domicilios de los empresarios y el del alcalde de Cee. El Volkswagen Touareg del regidor ceense también fue revisado por el secretario del Juzgado número 2 de Corcubión y por un agente.
La policía se marchó del Concello de Cee hacia las cuatro de la tarde con media docena de cajas con diversa documentación. Poco después, el alcalde abandonaba el edificio por la puerta de atrás cubriéndose con una carpeta. Fue introducido en un coche policial camuflado que partió con dirección a A Coruña.
En la casa consistorial de Mazaricos, en A Picota, los agentes permanecieron hasta las seis de la tarde revisando documentos en la alcaldía, la secretaría y la oficina del arquitecto municipal. De allí partieron con unas 20 cajas de documentación y con copias del disco duro y del correo electrónico del Ayuntamiento.
En Fisterra, el registro terminó hacia las cinco de la tarde. La Policía Nacional se llevó al alcalde y a los dos ediles, pero no documentos. Una hora después, los empresarios detenidos abandonaban el Juzgado de Corcubión en coches camuflados de la Policía Nacional.
A todos se les imputa la presunta comisión de delitos contra la Administración pública, entre ellos tráfico de influencias, prevaricación y cohecho y falsificación de documentos.
En Mazaricos, los agentes pidieron documentación sobre la contratación de obras municipales con la empresa de Ogando, específicamente la construcción de un campo de fútbol de hierba artificial, unas mejoras en la casa consistorial y una reforma del campo de la feria, todas ellas por un valor total de 800.000 euros.
En Cee y Fisterra los agentes buscaron además facturas relacionadas con la empresa constructora con sede en Muxía. En Cee también investigaron la contratación de atracciones en las fiestas.
Será el juez de Corcubión, Andrés Lago Louro, quien determine en las próximas horas el grado de implicación en el caso de cada uno de los detenidos y quien dictamine sobre su ingreso en prisión o su posible puesta en libertad.