Viajes en bus bajo demanda y a 1 euro para luchar contra la despoblación
Galicia
La Xunta estudia el modelo de Castilla y León para importar el transporte a la carta y adaptarlo a Galicia
08 Nov 2016. Actualizado a las 05:00 h.
Castilla y León es junto a Galicia y Asturias uno de los territorios más envejecidos de Europa. Amplias zonas de esta comunidad padecen una despoblación galopante y desde hace años la Junta castellanoleonesa ha puesto el problema demográfico entre sus prioridades políticas, apostando por favorecer la igualdad entre los ciudadanos de las zonas rurales y los de los ámbitos urbanos. En este tipo de políticas se enmarca el sistema de transporte bajo demanda que el Gobierno castellanoleonés desarrolla desde el 2004, consistente en adaptar el transporte -principalmente autobuses, pero también los taxis- a las necesidades de las zonas alejadas de las cabezas comarcales. Una delegación de la Xunta viajó ayer a Valladolid para estudiar sobre el terreno este modelo.
El sistema es simple en apariencia, y consiste en que los usuarios llaman a una central para reservar plaza en un autobús para el día siguiente. Ese vehículo puede desviarse o no de la ruta de la concesión, pero recoge a esa persona en su lugar de residencia y la lleva a su punto de destino por solo un euro de ida y otro de vuelta.
Esta tarifa plana es, por supuesto, deficitaria. El tramo de pérdidas en la explotación lo compensa la Junta de Castilla y León con seis millones de euros anuales de dinero público. «Este proyecto forma parte de las políticas transversales de la Junta de Castilla y León para combatir el declive demográfico», explica el consejero de Fomento castellanoleonés, Juan Carlos Suárez-Quiñones, que ayer ejerció de anfitrión de la conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, para compartir la experiencia de este proyecto pionero en España que la Xunta espera poder implantar de forma progresiva. «Este sistema nos servirá de ayuda para desarrollar uno similar en Galicia, teniendo en cuenta que la configuración de la población no es exactamente la misma», aseguró Vázquez. Está previsto que los primeros servicios bajo demanda se instauren en Galicia a partir del próximo verano, en aquellas concesiones que expiren y cumplan con los requisitos que finalmente se establezcan.
Castilla y León tiene un amplísimo territorio con núcleos muy dispersos y una densidad muy baja (27 habitantes por kilómetro cuadrado frente a los 92 de la comunidad gallega), pero carece de la profusión de viviendas dispersas de Galicia. A este tipo de diferencias se refería la conselleira.
Una tarifa «social»
En la comunidad vecina, la compensación del déficit de tarifa, que se mantuvo durante los años de la crisis sin variar un precio que el consejero califica como «social», se asume como parte de una política estratégica que el Gobierno castellanoleonés ha priorizado desde hace años. «Tenemos que garantizar la igualdad de los ciudadanos que viven en las zonas rurales, alejados de las cabezas comarcales, e intentar fijar la población dándoles servicios», aclara Suárez-Quiñones, juez de profesión. La conselleira siguió con atención las explicaciones de los técnicos de la empresa GMV, encargada de centralizar las llamadas y organizar los distintos medios de transporte para dar respuesta a las peticiones que los usuarios realizan vía teléfono gratuito o por Internet. En el centro virtual de transporte que ayer visitó la delegación de la Xunta, en un parque tecnológico cerca de Valladolid, se gestionan unos dos millones de llamadas al año de los 400.000 clientes potenciales que viven en las zonas rurales más apartadas. Aunque en realidad el servicio está disponible para algo más de un millón de habitantes, pues también lo utilizan usuarios de las cabeceras comarcales.
Apenas hay solicitudes en ruta. Los usuarios se han acostumbrado a planificar el viaje y a hacer la llamada preceptiva el día anterior. Los viajes sirven sobre todo para las visitas a los centros de salud y al mercado semanal de la comarca. El plan de transporte castellanoleonés incluye el aprovechamiento de las líneas del transporte escolar para dar servicio a los usuarios del rural, una idea que Ethel Vázquez también prevé implantar en Galicia. Esta combinación se desarrolla en 465 rutas escolares en 1.606 localidades.
El consejero valoró como muy positiva la experiencia, pues se acortaron los tiempos de viaje, se evitan concesiones de transporte que no resultan rentables en zonas con escasa demanda -ahora hay transporte público en más de 3.500 núcleos que no lo tenían- y se produce un interesante ahorro en combustible y emisiones -se hacen 2,5 millones de kilómetros en lugar de 11,5-, al tiempo que se acercan los servicios públicos a las zonas más periféricas. Se trata, en definitiva, de flexibilizar la oferta de transporte para adaptarla a la demanda. El objetivo de Castilla y León es generalizar este modelo en todo el territorio.
Diez empresas optan a diseñar el nuevo modelo de transporte, previsto para el 2020
La conselleira de Infraestruturas, Ethel Vázquez, confirmó ayer que el nuevo mapa de servicios de transporte en Galicia estará a pleno rendimiento en el 2020. La primera fase comenzará a partir de agosto del 2017. Para ello la Xunta ya ha licitado seis contratos que deberán concretar los servicios a implantar en una primera oleada. A estas seis licitaciones, según ha podido saber La Voz, se han presentado diez empresas del sector de la consultoría y la ingeniería. Se trata de la UTE que componen Aquática Ingeniería Civil, Teirlog y Eryba; otra formada por Tool Alfa y GOC; Iplan Movilidad; Altia Consultores; Eptisa; Prointec; Deloitte Consulting; la UTE de Iceacsa y Doymo; Idom Ingeniería; y Tema Ingeniería. Estos contratos cuentan con un presupuesto inicial de 2,5 millones de euros.
En Castilla y León este modelo se desarrolla en nueve provincias, en las que 400 vehículos diarios cubren 105 zonas en las que se han diseñado 810 rutas de transporte. En Galicia se pretende terminar con un modelo de concesiones que en muchos casos ya no sirve para atender las necesidades de movilidad en muchas zonas, no solo áreas rurales.
Después de que se adjudiquen los primeros servicios con el sistema de reserva integrado, la Xunta planea crear una plataforma que centralice las peticiones de los usuarios, que será muy similar a la que ayer visitó la delegación gallega encabezada por la conselleira Ethel Vázquez.