«El estudio puede ser de mucho interés para las rutas del vino»

investigadora del CSIC y jefa del grupo de viticultura que puso en marcha la Misión Biológica de Galicia en el año 2000, Carmen Martínez Rodríguez dirigió el proyecto de identificación de variedades tradicionales a partir de la decoración vegetal de las columnas de retablos barrocos.

-¿Cómo surgió el proyecto?

-El estudio amplía una tesis doctoral realizada con anterioridad por Pilar Gago [del grupo de viticultura]. Es el fruto de un trabajo que comenzamos con la colección de variedades de vid en Galicia. Llevaba mucho tiempo dándole vueltas a la idea de recurrir a los retablos. Hará veinte años que se me ocurrió, pero no fue fácil porque era un tema digamos un tanto ?raro?.

-¿En qué sentido?

-Somos botánicos, ampelógrafos, expertos en viticultura. Llevar la investigación al terreno de los retablos, a variedades talladas en madera, parecía un tema arriesgado desde el punto de vista científico. Temíamos que nadie se decidiese a publicarlo. Recibimos cartas de muchas revistas científicas que nos decían que era un trabajo precioso, pero que no tenía cabida dentro de sus contenidos. Fue difícil.

-Se habla mucho de microsatélites, de secuencias de ADN, y muy poco de estudios históricos sobre viticultura como el de Antonio Casares.

-Estoy totalmente de acuerdo. Conozco bien el trabajo de Casares, que fue el primero que habló de viticultura en Galicia. Entonces era frecuente relacionar historia y ciencia. Es algo que he puesto en práctica siempre. En cuanto a viñedo y variedades de vid, hay que ir a las fuentes antiguas. El vino está ligado a la historia, a las tradiciones, a la forma de vida de una sociedad. En esa época se hicieron trabajos muy importantes. Son una fuente muy valiosa, un punto de partida fantástico para el investigador.

-¿Hay referencias previas a Casares sobre descripción de de vides en Galicia?

-El libro de Casares es del año 1843. Con anterioridad no hay nada. No solo ocurre en Galicia, es algo generalizado. La primera descripción ampelográfica data de principios del XIX y fue obra de Rojas Clemente. A partir de esa obra, surgieron copias en toda Europa de esa metodología científica para describir variedades de vid. En Galicia, el primero fue Casares.

-¿Que valor concede al estudio sobre las presencia de variedades de vide en los retablos barrocos?

-Creo que es una aproximación original y rigurosa a los usos y evolución de la vid en el pasado, y que tiene además mucha utilidad para el enoturismo. Puede ser una propuesta muy atractiva para las rutas del vino.