El suceso ha tenido lugar en pleno casco histórico. El fuego se inició poco después de las cuatro de la madrugada en uno de los establecimientos de hostelería y se reavivó horas después en el contiguo.
02 ene 2012 . Actualizado a las 16:52 h.Aunque todavía continúan trabajando y un retén de tres personas permanecerá en el lugar del incendio durante varias horas más, los bomberos de Lugo dan por extinguido el fuego que esta noche dejó totalmente calcinados dos locales de copas en pleno centro histórico de la ciudad y obligó a desalojar a tres familias de sus viviendas.
Fuentes de los bomberos informaron a EFE de que el local de copas ubicado en el inmueble número 43 de la Rúa Nova, «La Noche», quedó reducido a cenizas y el fuego, que presumiblemente comenzó en ese establecimiento, afectó a todo el edificio, de tres plantas, en el que sólo vivía una familia.
Con respecto al inmueble del número 45, en cuya planta baja estaba el pub «El Gandul», los bomberos trabajaron durante toda la mañana para enfriar los restos del incendio, que dejó totalmente destruido el inmueble, una vivienda tradicional de dos pisos, construida en piedra, cuya cubierta se desplomó como consecuencia de las llamas.
En el dispositivo de extinción, que se activó pasadas las cuatro de la madrugada, han participado de forma continúa ocho bomberos, con el apoyo de tres vehículos pesados, equipados con autobombas y un brazo mecánico, desde los que se han bombeado unos 100.000 litros de agua.
A falta de que la Policía Científica aclare las causas de este suceso, el jefe de los Bomberos de Lugo, José Cedrón, explicó en declaraciones a EFE que los efectivos que participaron en la extinción del incendio en el inmueble número 43 dieron por sofocadas las llamas pasadas las cinco de la madrugada y, posteriormente, comprobaron que el fuego no había afectado al edificio colindante.
Sin embargo, poco después de marcharse los bomberos, el incendio se reavivó con virulencia en el inmueble de al lado, algo que a su juicio es «un poco extraño», porque «transcurrida media hora, la cubierta del edificio colindante estaba totalmente en llamas».
Por su parte, el propietario de «El Gandul», Juan Rogero, sostiene que el incendio en su establecimiento se inició, precisamente, en una de las vigas de madera del techo, conectada con el inmueble colindante.
En declaraciones a EFE, confirmó que recibió aviso de que estaba ardiendo el local contiguo al suyo, «La Noche», ubicado en el número 43 de la Rúa Nova, cuando faltaban cinco minutos para las cinco de la madrugada, según el registro de llamadas de su teléfono móvil.
Una vez sofocadas las llamas en el inmueble 43, Juan Rogero entró en su establecimiento, acompañado por agentes de la Policía Local y de los Bomberos, para comprobar que el incendio no había afectado al edificio número 45, y aunque había bastante humo en el local, llegaron a la conclusión de que se había filtrado a través de los conductos del aire, porque no encontraron indicios de fuego en la edificación.
Rogero explicó que los servicios de emergencias dieron por finalizada la intervención y él mismo se fue a su casa, convencido de que «los bomberos sabían lo que hacían», pero a las seis y veinte de la madrugada recibió otra llamada en la que lo informaron de que había comenzado a arder su local.
Tres familias fueron desalojadas por la Policía Local y los bomberos de Lugo en los inmuebles número 41 y 43 de la Rúa Nova, a causa del «humo tóxico» que salía de los dos pubs quemados y, aunque no hubo que lamentar daños personales, uno de los residentes, Carlos Longarela, reconoció que les quedó «el miedo en el cuerpo».
Este vecino explicó que el «humo tóxico», provocado por la combustión del aislante acústico de los pubs, entró en sus viviendas y no «dejaba respirar» a los inquilinos.