Festa rachada en el último fin de semana de julio

m. aneiros, nuria guillermo, maría doallo, andrés vázquez LA VOZ

AL SOL

ANA GARCIA

O Cochiño en Cerceda, la Festa do Caldo da Riola, el desembarco de O Vicedo y la Festa da Bica fueron algunas de las citas que disrutaron los gallegos a pesar de la lluvia

28 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

A pesar de la intensa lluvia que cayó durante la noche anterior, el sol volvió a brillar entre las nubes en la Festa do Cochiño de Cerceda. Desde las siete de la mañana, los asadores estuvieron en el recinto de O Acevedo preparando los 22 cochiños que se degustaron durante el día de ayer.

«Fomos aumentando na cantidade de cochiños que preparamos, porque cada vez vén máis xente á festa», explicaba Ángel, uno de los trabajadores de Asados Durán, que lleva más de cinco años haciéndose cargo de la preparación de la carne para esta celebración.

Aunque a lo largo de la mañana todavía cayeron algunas gotas de lluvia, la preparación de los cochiños no se vio afectada, puesto que, tal y como declaraba Ángel, «tivemos precaucións para a chuvia e preparámolos con calma».

Desde su punto de vista, lo que sí se vio ligeramente influenciado por la inestabilidad meteorológica fue la asistencia del público. «Este ano o tempo fastidiou un pouco, igual hai menos xente da esperada porque estas cousas están sempre condicionadas polo tempo», aventuraba. Sin embargo, en torno a las dos de la tarde el sol brillaba sobre las filas que comenzaban a formarse para recoger las raciones del plato estrella, el cochiño, acompañado, como siempre, por churrasco y pulpo.

Con la música de Faíscas da Pontraga y de la charanga Santa Compaña como banda sonora, familias y grupos de amigos de todas las edades llenaban platos, bandejas y ollas para disfrutar de la comida y de la compañía.

No solo vecinos del municipio y de localidades próximas acudieron al evento. Ricardo, por ejemplo, asistió por primera vez a la celebración con su pareja porque lo descubrieron a través de las redes sociales y decidieron acercarse a probar el cochiño.

Pese a la amenaza de lluvia, los organizadores coinciden en que en esta edición la afluencia de público fue mayor que la de años anteriores. El alcalde de Cerceda, José García Liñares, explicó que para esta 22.ª Festa do Cochiño aumentaron en 500 el número de plazas disponibles porque cada año aumenta el número de personas que se desplazan hasta esta celebración. La fiesta continuó con una exhibición canina durante la tarde, y a partir de las 20 horas se inició la verbena con las actuaciones de la orquesta París de Noia y el Combo Dominicano. Además, Nuria Fergó también actuó a las 23 horas.

MIGUEL VILLAR

festa da bica de trives

Amenazaba lluvia en Trives este sábado, por eso los puestos de bica estarán instalados únicamente este domingo. Lo que no faltó fueron el orgullo y la emoción de los triveses durante la inauguración de la fiesta que hace honor a su dulce más secular. Victoria Alonso fue la encargada de dar el pregón de esta edición, la número 46, de la Festa da Bica. Habló como hija del que fue fundador y propietario de la confitería Luciano y en su discurso se mostró totalmente agradecida: al Concello, a su padre y al resto de panaderos del postre manteigado. «Buenas fiestas, bicas e bicos para todos», deseó a los presentes.

Como ya es habitual, la celebración estuvo acompañada en todo momento por el sonido de las gaitas del Certamen Celtibérico de Bandas. La jornada del sábado contó con la presencia de la catalana Toxos e Xestas, la local Os Trinta de Trives y la Real Xuvenil ourensana. Hoy el festival se traslada a Cabeza Grande de Manzaneda, donde confirman habrá bicas para todos, además de gaitas.

PEPA LOSADA

Desembarco vikingo de O Vicedo

Después de unas horas lloviendo, salió el sol en O Vicedo y con él llegaron los vikingos. Algo tarde, eso sí, pues el desembarco comenzó con media hora de retraso. «E que tamén foron intentar entrar polo sitio máis complicado», comentaban desde tierra los antiguos marineros. Cuando todos estaban ya pensando en maneras de atracar, el barco tocó tierra y los invasores saltaron de él.

El grito de los caballeros cristianos se escuchó en todo el arenal: «Xa chegan os vikingos! Atacade!». Y eso hicieron. Aunque los recién llegados estuvieran comandados por Jesús Novo, el alcalde de O Vicedo, no dudaron en lanzarse contra los locales. Daba comienzo el combate y poco a poco iban cayendo los jinetes que se encargaban de defender la playa. Espadas, escudos, caballos y flechas, nada podía con la fuerza nórdica. Hasta que solo quedó un hombre: el que acabó con el rey vikingo Costilla de Hierro. La batalla había terminado y los guardianes vicedenses habían vencido.

cesar toimil

Más «vikingos», en Limodre

 Cada verano decenas de personas acuden a la parroquia de Limodre, situada en el municipio coruñés de Fene, para invadirla como auténticos vikingos. Montados en lanchas hinchables, colchonetas e incluso motos de agua, y armados con cubos y pistolas de agua, los asistentes parten de la playa Río Castro y ponen rumbo a la parroquia vecina, Redes, perteneciente al concello de Ares, desatando una auténtica batalla en el arenal. Tras la expedición, los guerreros volvieron a su punto de origen para celebrar la victoria con una cena y las actuaciones musicales del grupo Pasión y los ferrolanos Malditos Pendejos.

La tradición comenzó en el año 2006 y desde entonces la fiesta se ha ido convirtiendo en uno de los acontecimientos más esperados del verano. Sin embargo, esta vez la mayoría de asistentes parecía haberse olvidado los disfraces de vikingo, pues fueron pocos los que acudieron a la cita ataviados como los guerreros.

BASILIO BELLO

600 tazas de caldo

 Cerca de 600 tazas del Caldo de Riola se repartieron durante la tarde de ayer en A Ponte do Porto, en Camariñas, con las actuaciones de las charangas Os Celtas y BB+ para animar la jornada.

Hace 3 años que el Concello camariñán decidió retomar esta tradición proveniente de 1990, cuando los habitantes de la zona decidieron comenzar a preparar este caldo en una celebración durante el día de la matanza. Es por esto que el componente principal del plato es la carne de cerdo, acompañado por algunas vísceras y por patatas.

A partir de las 20 horas comenzaron a repartirse las raciones. Antonio Carrera, uno de los vecinos organizadores, destacó la gran afluencia de público procedente de localidades lejanas, incluso de Vigo y Pontevedra. «A xente non o coñece, polo que se achega a coñecer o que é. Os que veñen de fóra incluso repiten de ano a ano. Moitos xa me avisaron de que ían volver para esta edición», afirmó.