Los autores del robo de seis ordenadores y un portátil cometido la noche pasada en el IES Dionisio Gamallo Fierros de Ribadeo sabían lo que buscaban y cómo moverse y es que se llevaron los seis equipos mejores y más modernos de que disponía el centro; eran seis aparatos de la marca Dell, los últimos que llegaron al instituto.
Los autores forzaron la reja y rompieron una de las ventanas de la fachada trasera del edificio (la que da a las viviendas sociales), que es de doble cristal, para acceder al interior, donde se movieron a su libre albedrío. Uno de los lugares a donde entraron fue al aula de tecnología donde, tras romper la puerta, hicieron acopio de material para forzar otras puertas interiores que les separaban de sus objetivo, el aula de informática, donde estaban los equipos que se llevaron.
El director del IES, comentaba ayer que este fue un hecho aislado y que quien o quienes fuesen los autores de este robo sabían bien por donde moverse y lo que querían llevar; lamentó no sólo las pérdidas materiales que sufrió el centro, sino también el perjuicio que supone el hecho para el desarrollo de la actividad docente, ya que por el aula de informática pasaban los alumnos para recibir clase e incluso los utilizaban en horas de recreo para realizar trabajos.
No tienen sospechas de quién puede ser el autor de este robo y suponen que ahora, para borrar cualquier pista de los aparatos, les quitarán las carcasas exteriores donde va la marca de los equipos y el logo de la Consellería de Educación así como el número de lote y luego los irán vendiendo por piezas. En este sentido, sería útil que cualquier persona que detectara que se están comercializando piezas sueltas dé aviso por si se trataran de las robadas aquí; el exterior de los aparatos seguramente aparecerá tirado en algún contenedor o abandonado en cualquier rincón.
Los ordenadores no son lo único que se han llevado estos cacos. También tuvieron tiempo de hacer pintadas, pasarse por conserjería y acercarse a la cafetería donde, según explicaba el director, no se llevaron dinero porque simplemente no había, pero si que aprovecharon la visita para apoderarse de una caja de coca-colas y diversas golosinas, incluido el regaliz rojo (el de menta lo dejaron). Saben que los daños causados fueron cuantiosos, aunque a la hora de redactar esta información estaban aún sin valorar. La policía judicial de la Guardia Civil se personó en el lugar ayer por la mañana para investigar lo sucedido y tomar muestras. El director del Gamallo Fierros apuntó la conveniencia de que en la parte trasera, por donde entraron ayer los ladrones, una zona oscura y deshabitada, coloquen vallas de separación, tal como solicitó en su momento la Consellería, pues tal como está constituye un problema porque los niños pueden acercarse hasta allí.