26 nov 2014 . Actualizado a las 13:00 h.
Cada fin de año Alcoa y su plantilla se enfrentan a la misma incertidumbre: Cuánto va a costar producir una tonelada de aluminio y cómo lo colocará en un mercado totalmente globalizado en el que la competitividad es primordial. Estratégica para una comarca que carece de enclaves industriales a mayores, a vueltas con el precio del recibo eléctrico, al menos llegará por fin el gas al complejo, abaratando costes en la planta de alúmina.