Sus restos reposarán hoy en el cementerio civil de Vigo, «donde él quería»
23 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.La noticia del fallecimiento en Vigo del poeta Carlos Oroza corrió como la pólvora en los círculos culturales y sociales de la ciudad del Landro durante la madrugada del domingo. Por la mañana, la alcaldesa, María Loureiro, expresó el reconocimiento del Concello de Viveiro a «uno de los poetas más importantes en lengua castellana». En su memoria ondean desde ayer las banderas a media asta en el balcón del consistorio.
La capilla ardiente con los restos mortales de Oroza estará instalada desde las 10 de la mañana de hoy en la Casa da Cultura de Vigo, y podrá ser visitada hasta las 17.30 horas. El entierro será a las 18.30 horas en el cementerio civil de Pereiró, «donde él quería», según explicó su editor, Javier Romero González desde la ciudad olívica. «Carlos estuvo bien hasta hace dos o tres meses. Estaba delicado, consciente de que se acercaba el final, pero siempre razonando y con la cabeza en su sitio», explicó el editor. «Se fue, pero no se fue. Carlos consiguió lo que no consigue todo el mundo, ser inmortal», añadió Romero.
El portavoz de Editorial Elvira, que publicó su última antología poética, Évame, agradecía que el Concello de Viveiro hubiera colocado las banderas a media asta en su memoria. «Hubiera sido bonito que pudiera se le hubiera dedicado la calle», añadió.
Al respecto, la alcaldesa dijo que la decisión adoptada en pleno de dar el nombre del poeta al callejero dela ciudad sigue en pie, aunque tendrá que ser una comisión quien finalmente determine la idónea.
El ceramista Alfonso Otero Regal revivía ayer algunos de los recuerdos, artículos, cartas y fotografías relacionados con el poeta. Recordaba además el homenaje realizado en el Centro RegalXunqueira en la primavera del 2012, a través de una exposición en la que participaron diferentes artistas. En aquella ocasión además se había proyectado el documental Cabalum, del propio Oroza, y se había iniciado la campaña para pedir al Concello el homenaje. «Outro grande de Viveiro que se vai», destacaba un internauta.