Nueve equipos de fútbol mariñanos ya se posicionaron contra el inicio de las competiciones por el covid
A MARIÑA
Firman una petición con más de una treintena de conjuntos de la provincia que compiten en Primera, Segunda y Tercera Galicia
26 sep 2020 . Actualizado a las 05:00 h.La mayoría están impacientes por volver a competir después de tantos meses parados, pero no lo ven viable con mascarillas, y mucho menos factible a nivel económico si tienen que costearse test periódicos. Por eso, un notable porcentaje de los conjuntos de la comarca ya han firmado una misiva a la Federación que engloba a 35 clubes de la provincia de Lugo que juegan entre Primera y Tercera Galicia. A la iniciativa nacida en el equipo directivo del CD Cospeito le han añadido ya su firma el Sporting Pontenova, el Alfoz, el Lourenzá y el Folgueiro, de Primera; Mondoñedo, San Ciprián, Candelaria y SD Viveiro, de Segunda; y el Celeiro Club del Mar, de Tercera.
Otras entidades, no obstante, podrían unirse aún al documento, que se entregará el miércoles a la Federación Gallega. Es de destacar que el ente federativo aún no ha sacado un protocolo definitivo para las categorías autonómicas, después de que la Xunta ordenase jugar con mascarillas, y tampoco hay calendario. Por eso muchas entidades han decidido esperar antes de pronunciarse oficialmente.
La Preferente, donde competirán el Foz y el Ribadeo, es la otra categoría pendiente de la situación. 20 de los 23 clubes del Grupo Norte ya redactaron un texto en el que explican que en las actuales condiciones es imposible que se dispute la competición. Además del uso de las mascarillas y el coste de los test, genera debate la sanción de pérdida de encuentros en el caso de que se produzcan varios positivos por covid en las filas de un mismo equipo.
Al menos 35 equipos lucenses quieren retrasar el inicio del fútbol modesto
Decenas de clubes de la provincia creen que la situación sanitaria hace inviable empezar la competición
André S. Zapata
El inicio del fútbol modesto en la provincia de Lugo está pendiendo de un hilo. Al menos 35 equipos de todos los grupos de Primera, Segunda y Tercera Galicia de la zona están preparando un escrito por el que le pedirán a la federación retrasar el inicio de la competición. El motivo es exclusivamente sanitario. Los clubes consideran que la situación de la pandemia del covid-19 en Galicia resulta un impedimento insuperable para disputar la competición de forma segura.
La iniciativa nació del equipo directivo del C.D. Cospeito. Jesús Novo, el presidente del club, y Luis Romay, el entrenador, unieron a los equipos de la provincia para expresar conjuntamente su malestar. «Isto non é nada persoal contra a Federación ou contra a delegación de Lugo. Simplemente queremos expresar a nosa opinión, que é que non se debe disputar unha competición deportiva nesta situación», dice Novo. Para ellos, es inviable seguir adelante con el inicio de liga viendo la realidad sanitaria de la provincia. «Nós non somos profesionais. A maioría dos equipos destas categorías existen para darlle vida aos pobos da zona e para fomentar as atividades deportivas. Non estamos dispostos a arriscar as nosas vidas e as dos nosos seres queridos por algo polo que nin sequera cobramos un euro», explican desde Cospeito.
Otra problemática, como apuntan los clubes, es la no profesionalización de estas categorías. Es decir, los jugadores tienen empleos a tiempo completo fuera del fútbol. «Haberá moitas empresas que prohiban aos seus traballadores ir xogar e entrenar, porque teñen medo de que se contaxien e provoquen un brote na empresa. Iso é un problema real que desde a Federación non contemplan», cuenta Jesús Novo.
En otras zonas de Galicia, como en Ferrol y alrededores, los equipos han apostado por esperar a que la Federación publique el protocolo sanitario antes de tomar una decisión. Sin embargo, en Lugo piensan que «non hai protocolo que vaia protexer ao fútbol modesto contra o virus. É unha batalla perdida». En A Costa da Morte fueron los primeros en alzar la voz, calificando de «irresponsabilidade» la decisión de la Federación de comenzar la competición. En A Coruña, As Mariñas o Vigo, también tomarán una decisión en los próximos días, muy pendientes del protocolo definitivo.
Desde Cospeito han iniciado esta determinación de los clubes, en los que al menos 35 ya han confirmado que van a apoyar la publicación del documento. Otros tantos equipos, con los que también han contactado, todavía están en proceso de decidir su postura. Tienen hasta el miércoles para elegir su posición final. Será entonces cuando le entreguen el documento a la Federación, con el objetivo de frenar el inicio de liga.
La Real Federación Galega de Fútbol ya tiene constancia de esta propuesta, y se reunió esta misma semana con los clubes. La RFGF expresó su «respeto» por la decisión, pero advirtió con sancionar a los clubes que se nieguen a disputar la competición, incluso con el descenso automático. «A nós danos igual. Temos decidido que non imos xogar e terán que acabar por atender a nosa petición se somos maioría», explican en Cospeito.
«Desde la Federación compararon contagiarse por covid con lesionarse una rodilla», comenta uno de los representantes de los clubes que estuvieron en la reunión telemática del pasado jueves. «Nos pareció bastante desafortunado, sobre todo porque por una lesión de rodilla no pones en peligro a los demás», explican.
En el borrador del comunicado, al que ha tenido acceso La Voz de Galicia, los clubes consideran «unha irresponsabilidade comenzar as ligas de fútbol rexional no mes de novembro, sen saber como se vai a comportar o virus na época de frío coincidindo con outras enfermidades respiratorias». En una lista de nueve puntos, expresan su disconformidad con el uso de mascarilla durante la actividad deportiva, su nulo beneficio derivado de una competición que «non aporta nada economicamente», o su imposibilidad de realizarle tests periódicos a los jugadores. Finalmente, expresan su negativa a comenzar la competición hasta que se cumplan tres premisas clave: que las condiciones sanitarias sean óptimas, que los jugadores y técnicos no corran un riesgo real de contagiarse y poner en peligro su vida y la de los demás, y que equipos y jugadores no sean sancionados por esta decisión.