Raquel Graña, sexóloga y psicóloga mariñana: «Es uno de los años más dramáticos para los solteros»
A MARIÑA
La profesional ya roza los 700.000 seguidores en «Íntimas conexiones», su canal de YouTube
07 feb 2021 . Actualizado a las 12:10 h.2016 es el año de nacimiento de Íntimas Conexiones. A casi 700.000 personas en todo el mundo ya les suena ese perfil en redes sociales, tras el cuál está la psicóloga, sexóloga y coach mariñana Raquel Graña. Ese canal de divulgación en tema de sexualidad, educación sexual y autoestima, entre otros temas, cumple cinco años. Y las cifras, sobre todo por el volumen de miles de «followers» que tiene en YouTube, dan pie a hablar de exitazo digital. Su «¡Hola bombones!» internauta la identifica, saludo que surgió así: «Buscaba un término que pudiera incluir a todos los sexos, que no fuera exclusivo de uno y, como siempre me ha gustado la palabra ‘bombón'... ¡Probamos!». ¡Y vaya si resultó!
-Los temas que aborda, de sexología, tienen más tirón gracias a Internet. ¿Cuál es la explicación de ese éxito digital? ¿Influye que los que se conecten sean sobre todo los más jóvenes?
-El éxito digital nunca lo puedes predecir, sino todo el mundo se haría viral fácilmente. A veces es algo elaborado; otras, lo más absurdo. Depende de lo que quiera consumir en ese momento el público. Y sí, los jóvenes están conectados todo el tiempo y el consumo cada vez es mayor, pero no solo de ellos, también de los más adultos. ¿Por qué? Es fácil, rápido y está al alcance de tu mano. ¿Qué más puedes pedir?
-¿Cuántos canales tiene o lleva con Íntimas Conexiones, su marca, además de web propia?
-Tenemos canal de YouTube, página web donde se contratan las consultas online, cursos sobre sexualidad, talleres de educación sexual y todo el contenido que publicamos en redes sociales. Además, en mi perfil de Instagram (donde somos más de 50.000 seguidores) publicamos vídeos semanales sobre relaciones saludables, patrones familiares, crecimiento personal... Estos vídeos se quedan en mi perfil de Instagram y se publican de forma paralela en un canal de YouTube secundario que tiene mi nombre, Raquel Graña. También hacemos directos semanales aquí y en Twitch... ¡una plataforma streaming donde acabamos de comenzar!
-En YouTube roza los 700.000 seguidores. ¿Cuánto representa ese volumen en su trabajo? ¿Le afectan ciertos comentarios? ¿Qué vídeos han sido virales?
-Realmente el canal de YouTube nos sirve de marca, reconocimiento y expansión. Esto lo ves cuando voy a dar talleres de educación sexual en colegios, institutos, FP... Cuando me presento y hablo del canal, automáticamente capto su atención y ya están súperinteresados en todo lo que pueda decir. También lo vivo con los medios de comunicación, con entrevistas que realizo con Australia o EE.UU. y con la repercusión de la venta de cursos online o consulta online, con clientes de todo el mundo.
Los comentarios negativos me afectaron más en su día que en la actualidad; también es cierto que no tengo tiempo para exponerme a ellos. Lo único, si me entra algún hater o machista en algún directo, ahí lo que hago es reportarlo, echarlo del directo y entender que tiene que haber de todo en la vida. ¡Lógicamente no le voy a gustar a todos! Y, por desgracia, el esconderse detrás de un perfil falso e intentar hacer daño es muy fácil. Los vídeos tienen tantísima buena aceptación porque son muy accesibles. Si tienes un ratito libre, ¿qué haces? ¡Ves el móvil! Mucha gente pone los vídeos de fondo y me va escuchando; me lo tienen dicho.
En YouTube los vídeos más vistos se relacionan con técnicas prácticas, depilación, higiene o errores. El más viral tiene casi 30 millones de reproducciones y los demás entre 4 y 1 millones. En Instagram los vídeos más vistos suelen ser sobre familias disfuncionales, parejas tóxicas y dependencia emocional. Aquí no tienen la misma repercusión, rozando las 10.000 reproducciones.
«Es uno de los años más dramáticos para los solteros»
-¿Se considera, de algún modo, «influencer» desde la sexología? ¿Cuál cree que es su aportación?
-Me cuesta verme como «influencer», pero sé que realmente soy referente nacional e internacional en esa rama. Y, en especial, sobre dependencia emocional, en las relaciones saludables, gestión emocional y educación sexual. Mi aportación principal se centra en las relaciones saludables, en gestionar la comunicación, la confianza y el respeto dentro de las relaciones. Hay que educar en valores tanto a los jóvenes como a los adultos y, por desgracia, cada vez se transmite una imagen más frívola sobre el sexo. Queda mucho trabajo de concienciación. Adoro Instagram precisamente por esto, porque la gente me conoce más, empatiza y entiende por qué trabajo esta línea.
-Y tiene consulta «online».
-Me gusta decir que es innovadora en Galicia, porque nos cuesta mucho salir de «lo presencial» cuando ahora una consulta física me parece súper fría y poco empática con la mascarilla. La consulta online es genial; desde la comodidad de casa hablas conmigo sin desplazarte. Tengo clientes en Galicia, resto de España, pero también en Australia, Francia, EE.UU., México, Noruega... Además, les doy la facilidad de que si se encuentran mal en algún momento pueden enviarme un email y gestionamos una consulta rápida. Es atención personalizada; la suerte que tenemos es que me conocen previamente por redes.
-¿Qué le gustaría conseguir?
-Que más gente fuera a consulta, normalizar la terapia. Porque de cinco mujeres en consulta que trabajan sus patrones familiares heredados, creencias, miedos, inseguridades, autoestima, ex tóxicos... hay un hombre. Deja claro quién está trabajando más en sí misma y en su propio bienestar. ¿Cuál es el problema? Que esas mujeres maduras no van a querer a ninguna persona que no haya trabajado en sí misma y tenga muchos estereotipos, patrones y problemas emocionales no trabajados. Quiero ayudar a las personas a que se validen por sí mismas, aprendan a quererse y no se anulen dentro de la relación con otro; guiarles a tener relaciones saludables. Lógicamente, esto se realiza con los adultos. Los jóvenes tienen mi libro Sex On, donde hablo de educación sexual y también de emociones y valores fundamentales en la vida.
-La pandemia, ¿cómo nos afecta desde el punto de vista sexual?
-La afectación principal es a nivel emocional y mental. Cuando esto falla, el resto ya da igual. La parte sexual se ve afectada como causa-efecto, suele ser un detonante de mala comunicación, faltas de respeto, incomprensión o poco apoyo en la pareja. ¡Por no hablar de los solteros! Es uno de los años más dramáticos en ese sentido. En consulta mucha gente dice «tengo miedo a quedarme soltera/o», pues con la pandemia y sus restricciones es muy difícil conocer gente en el día a día.
Próximamente, Raquel Graña impartirá un curso de bienestar emocional para la UNED, los días 23 y 25 de febrero y 2 y 4 de marzo.