Desde Alcoa creen que estos incidentes ponen en peligro las operaciones de la multinacional y de otras empresas que necesitan el material para seguir en funcionamiento
17 mar 2022 . Actualizado a las 16:33 h.Mientras en Asturias, según confirmaron desde la Delegación del Gobierno, han discurrido en las últimas horas y sin incidentes las salidas de 31 convoyes escoltados por las fuerzas del orden y solicitados por empresas para distribuir mercancía de primera necesidad o de usos prioritarios, en la provincia de Lugo se registró la noche pasada un ataque a un convoy especial de aluminio procedente de la fábrica de Alcoa, en San Cibrao (Cervo), según confirmaron este jueves desde la propia compañía y también desde la Subdelegación del Gobierno.
El transporte, integrado por cinco camiones y escoltado por la Guardia Civil, recibió diferentes ataques, entre otros, el lanzamiento de piedras desde puentes de la carretera nacional, con la consiguiente rotura de lunas de los camiones. Esta situación obligó a abortar la misión al ponerse en peligro la integridad física de los chóferes y ante el riesgo de sufrir algún accidente. El convoy tuvo que regresar al punto de origen pocos kilómetros después de iniciar viaje, según confirmaron diferentes fuentes.
Desde Alcoa San Cibrao confirmaron que se trataba de un convoy que llevaba un pedido de aluminio para un cliente. Desde la multinacional sostienen que respetan el derecho a la huelga en el sector del transporte, pero destacan que este tipo de incidentes pueden poner en serias dificultades el normal funcionamiento de otras empresas al no recibir materias primas básicas para seguir produciendo, así como las repercusiones para Alcoa, que teme que haya problemas para recibir también suministros en la propia fábrica, tanto para fundición como para la refinería.
«Con determinadas materias primas se puede poner en peligro el normal funcionamiento de las firmas de nuestros clientes», explican fuentes de la multinacional, que este jueves también reconocieron que para traslados de materias primas o de suministros prioritarios han pedido apoyo y protección policial a la Subdelegación.