Así se prepara el campeón mundial de Viveiro, Miguel Seijo, para ser Míster Universo de Men's Physique

Después de una larga preparación, para Miguel Seijo (Viveiro, 1974) llega la hora de la verdad. El próximo domingo competirá en Tarragona por el título de Mister Universo de Men's Physique. Tras lograr en 2021 el oro máster en el Campeonato del Mundo de la Wabba, en la localidad italiana de Perugia, el mariñano aspira a un nuevo triunfo mundial en fitness.

Seijo competirá en Tarragona en tres categorías. En la sénior, modalidad abierta, se disputará el título con aspirantes de todas las edades. «Voy a medirme con chavales de veinte o veintipico años. Para mí es un reto demostrar que, con mi edad, todavía puedo ganarles», expone. También probará suerte en las competiciones para mayores de 40 años y mayores de 45.

Para coronarse Mister Universo en Men's Physique importan la elegancia estructural y la proporción del cuerpo. Para cumplir estos requisitos, el viveirense realizó esta vez una preparación más larga en el tiempo, pero que implicó a la vez menores privaciones. «He buscado otro camino, nunca lo había probado, y la verdad es que me siento mejor incluso que el año pasado. Empecé antes y esto me dio soltura, pude permitirme de vez en cuando saltarme la dieta», afirma.

Para presentarse al campeonato, «el 80 % es tener una buena nutrición», afirma. El viveirense llevó una rutina de cinco comidas al día, «en las que todo está medido». Ingirió entre 2.200 y 2.400 calorías diarias, «aunque a medida que se acerca el campeonato bajo a 1.500, porque lo más importante es tenerlas controladas», expone. En su día a día abundan las carnes ligeras, como el pollo o el pescado, los huevos o las verduras. «Hay que buscar lo que menos química tenga, cero procesados en la medida de lo posible. Siempre digo lo mismo: del campo, de los animales y del mar», argumenta.

En cuanto al ejercicio, el viveirense invirtió en su preparación entre una hora y una hora y cuarto diarias, y hace cada vez más hincapié en los ejercicios de resistencia. «Hay que entrenar lo justo, con inteligencia, respetando el cuerpo. Aquella mentalidad de antes, a lo Rocky, dejándose la vida, ya no sirve: esos esfuerzos pueden funcionar a corto plazo pero tu cuerpo tiene que durar, estar bien a los 60 años, a los 70. Si te pasas con el peso, el músculo crece, pero los tendones y los ligamentos no. Solo eres de fuerte como tu eslabón más débil, y si te dejas llevar por el ego, te rompes. La intención es tener el cuerpo más perfecto posible, pero no se trata de pasarte con el tamaño, porque cuanto más grande eres, más tóxico es para el organismo. Yo nunca tuve una lesión grave y es porque siempre fui cauto», manifiesta.

Seijo admite que «cuando se acerca el campeonato la presión se nota. Tras el oro mundial de Perugia noto que hay más gente pendiente de mí y tengo la sensación de que no puedo fallarles», afirma. En este sentido, agradece «el apoyo del Concello, de la alcaldesa de Viveiro, María Loureiro, y de toda la gente que confía en mí».

En el fitness todo depende del detalle, expone, «porque tienes que estar en tu mejor momento físico en un momento determinado. No es una ciencia exacta, a veces sale bien y otras mal. Hay que plantarse delante de toda esa gente, con todos esos focos brillantes, con ese estrés que hace que te parezca que te vas a desmayar...», relata. Aún así, Seijo confía en poder volver a Viveiro con el título. «Busco hacer historia y creo que tengo posibilidades», resalta.

Si lo logra, lo celebrará con una concesión: «si gano, lo primero que haré es buscar una buena heladería», ríe.

El burelense Iván Souto, también a escena

También competirá en Tarragona este fin de semana el burelense Iván Souto Calvo, de 27 años, que competirá el sábado en el Nacional de Men's Physique para intentar hacerse con una plaza para el Mister Universo del domingo.

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