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Adiós a Do Boludo, el pizzero de la sonrisa permanente

Serxio González Souto
Serxio González VILAGARCÍA / LA VOZ

AROUSA

Juan Carlos Galiñanes supo hacer de cada cliente de su restaurante en Vilagarcía un amigo

31 ene 2022 . Actualizado a las 22:43 h.

Aunque su salud se había resentido en los últimos tiempos, pocos en Vilagarcía de Arousa podían sospechar que Juan Carlos Galiñanes Abal se iba a despedir tan pronto. El hostelero argentino, afincado en Vilagarcía desde hacía tres décadas, falleció el sábado. Tenía solo 55 años. Un par de semanas atrás estuvo hospitalizado por una serie de problemas respiratorios que parecía haber superado. Recayó en ellos, sin embargo, y no pudo remontar esta nueva crisis.

Con Juan Carlos se va el alma de un establecimiento que su fundador supo convertir en sinónimo de pizza a esta orilla de la ría. Do Boludo popularizó los calzones, esas pizzas que dan la vuelta sobre sí mismas para convertirse en una especie de grandes empanadas. Las empanadillas argentinas y, desde que se trasladó del antiguo Carballinés al amplio local del Bosque dos Desamparados, también las carnes a la parrilla eran sus otras especialidades. Es probable que sus hornos, en los que su hija Ángela echaba una mano los fines de semana, aprovechando los huecos que van dejando los estudios, continúen funcionando. Pero probablemente lo hagan en un nuevo emplazamiento. El hecho de ser invidente no le ha impedido a su hijo pequeño, Pablo, avanzar en la música y dominar ya la guitarra. El mayor, Matías Ezequiel, vive en Argentina.

Hincha de su selección y del San Lorenzo de Almagro, Do Boludo sentía debilidad por el Real Madrid a este lado del gran charco. Alegre, simpático, «sempre recibía a xente cun sorriso e facía de cada cliente un amigo». Así lo recordará siempre uno de ellos, que lo echa ya de menos.