El cuatripartito de Cambados acaba el año sin reunir la comisión del pacto de gobierno y con Abal haciéndose de rogar
AROUSA
El BNG solicitó la convocatoria de la comisión ante la «descoordinación» que percibe en el ejecutivo local
28 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.El Bloque Nacionalista Galego de Cambados compareció el pasado 10 de diciembre en rueda de prensa para dar cuenta de su malestar por el funcionamiento del pacto de gobierno suscrito por el PSOE, Somos, BNG y Pode. Se quejaba de la descoordinación e improvisación que, afirma, rige la gestión municipal y anunció que iba a solicitar una reunión de la comisión de seguimiento del pacto para tratar de reconducir la situación. Su intención era que esta reunión se celebrase antes de acabar el año. No podrá ser. Tendrá que esperar, en el mejor de los casos, a la primera quincena de enero, según las previsiones que maneja el portavoz nacionalista, Liso González.
PSOE y Somos ya dijeron en su día que no tenían inconveniente en reunir la comisión de seguimiento, pero la cuarta pata de la mesa se tambalea. El concejal de Cambados Pode, José Ramón Abal, no parece estar por la labor y, en su línea, da largas cuando se le pregunta por el tema. «Este é un tema dos partidos da esquerda, entendo o cabreo do BNG, pero nós non queremos líos», señala cuando este diario le pregunta si acudirá o no a la convocatoria del BNG.
Los líos a los que alude nacen de lo ocurrido en el pleno celebrado a principios de mes, a propósito del debate abierto por la compra del asilo de Cambados. El grupo municipal del Bloque acabó ausentándose de la sesión en señal de protesta porque sus socios de gobierno no le habían informado de un cambio introducido a última hora en la moción que se sometió a votación. El matiz no era baladí para el BNG ya que compromete al Concello a colaborar económicamente llegado el caso de comprar el pazo de Montesacro, cuando la izquierda de Cambados siempre sostuvo que la inversión debería ser asumida por la Xunta de Galicia, atendiendo a sus competencias y capacidad económica.
Aquel episodio llevó al BNG a dar un golpe en la mesa que se materializó en una asamblea local y una rueda de prensa en la que lazó un mensaje claro: siguen apostando por el pacto de gobierno a cuatro bandas, pero las cosas deben cambiar, empezando por el papel de liderazgo que le corresponde al alcalde Samuel Lago.
A la vista de la reacción de Abal, que ya ha demostrado en varias ocasiones que va por libre a la hora de gestionar sus áreas y de votar los asuntos que llegan al pleno, el BNG no lo va a tener fácil a la hora de conseguir aunar voluntades y criterios entre sus socios. En todo caso, la coalición no corre peligro: «Non queremos que goberne o PP, queremos que o goberno de Cambados teña futuro», indicaba el responsable local del Bloque hace tres semanas, Iago Pillado.