O Salnés se quedó hoy sin bomberos y dependiendo de la base de Porriño

Los dos parques de bomberos de O Salnés, el de Ribadumia y el de Vilagarcía, permanecen a esta hora cerrados como consecuencia de la situación laboral que se vive en el Consorcio contra incendios de Pontevedra. La plantilla lleva meses en una huelga que les lleva a no cubrir las bajas y las vacaciones de sus compañeros como medida de presión para que se les reconozca la condición de personal fijo en aplicación de una sentencia del Tribunal Supremo.

La administración —del Consorcio forman parte la Xunta y la Diputación— hace caso omiso a sus demandas y este conflicto está afectando al servicio cada vez de forma más grave. Los efectivos disponibles no son suficientes para cubrir los turnos de los cuatro parques de la provincia —Ribadumia, Vilagarcía, Porriño y Bueu—, lo que obliga a cerrarlos. El que más está acusando esta situación es el de Vilagarcía, que lleva meses sin funcionar; el sábado también tuvo que echar el cerrojo el de Bueu y, durante unas horas como consecuencia de una avería, el de Porriño, siendo el de Ribadumia el único operativo para toda la provincia. Hoy se repite la situación dado que uno de los trabajadores de Ribadumia tuvo un accidente y fue necesario cerrar la base al no cumplirse la ratio mínima para cubrir el turno de manera que solo está abierto el de Porriño.

Esta precariedad de medios coincide con la época del año en que se produce la mayor concentración de población en la provincia como consecuencia del turismo. Los bomberos, además de apagar incendios urbanos, también acuden a los accidentes de tráfico donde es necesario excarcelar a personas atrapadas dentro de los vehículos y otras incidencias.

---

---

---