Salomé Fernández, la opositora que enseña inglés a gente de todo el mundo a través de la pantalla

Laura Ríos
laura ríos RIBEIRA / LA VOZ

BARBANZA

Salomé Fernández utiliza su propio teléfono y un trípode para grabar sus vídeos.
Salomé Fernández utiliza su propio teléfono y un trípode para grabar sus vídeos. CARMELA QUEIJEIRO

Algunos vídeos de la ribeirense han alcanzado la friolera de medio millón de reproducciones

29 feb 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El momento de recibir el boletín de notas puede causar diferentes sensaciones dependiendo de los resultados académicos. Para los que aprueban todo, la alegría de ver el fruto de sus esfuerzos reflejado en un papel tan importante es instantánea, mientras que otros quizás preferirían quemar el documento antes de que lo viesen sus padres. A veces una de esas materias que se pueden cruzar en el camino es la de inglés.

Aprender a leer, escribir y hablar en otra lengua es muy complicado, por eso es importante que los alumnos estén en contacto con este idioma extranjero también al salir de las aulas. Ese es el objetivo con el que la ribeirense Salomé Fernández creó el año pasado salomesays.eng, un perfil en redes sociales en el que algunos de sus vídeos han alcanzado, en tan solo unos meses, la friolera de medio millón de visitas: «Non me esperaba para nada o impacto».

Todo fue una gran sorpresa, pues la iniciativa nació como una vía de conexión más allá de las clases con los alumnos a los que enseña inglés en una academia. La idea surgió del fuerte interés que ponen los chavales en las nuevas tecnologías y la atención que prestan a los influyentes que les gustan: «Vin que recibían mellor a información se utilizaba estímulos como vídeos curtos».

Lo que empezó con una especie de experimento personal en el que dar rienda suelta a su afición por la comunicación ha acabado por convertirse en una potente plataforma con la que llegar a todos los rincones del mundo: «Sígueme xente de moitos países, moitos deles de América Latina, é unha pasada». El gusto de la ribeirense por la docencia, que en la actualidad está opositando para ser profesora de inglés en algún instituto de secundaria, le viene de las más tierna infancia, cuando ya jugaba a impartir lecciones a sus primas pequeñas.

Quizás esa vocación natural por la enseñanza es lo que la hace sentirse especialmente feliz cuando algún usuario deja un comentario positivo: «Cando me din que sempre dubidaban sobre algo e que agora non grazas a un vídeo meu, é unha satisfacción enorme».

Ponerse a prueba

Para reforzar lo aprendido no hay nada mejor que hacer ejercicios en los que poner a prueba los conocimientos adquiridos, por eso la ribeirense sueña con, algún día, dar forma a un libro didáctico con el que gente de todas las edades pueda practicar el idioma: «Aínda non teño moi claro se sería en formato físico ou nunha páxina web, pero encantaríame ter material para que a xente o utilizase libremente».

Otra de las herramientas para hacer el oído a palabras que, a priori, no se entienden, es consumir todo tipo de contenidos en inglés. Series y películas con o sin subtítulos, considera, pueden ayudar a los alumnos a naturalizar el sonido de esta lengua extranjera y adquirir un mejor vocabulario: «Hai estudos que demostran que os seres humanos aprendemos unha palabra nova cando a escoitamos dez veces en contextos diferentes».

La opositora, que utiliza los pocos ratos libres de los que dispone al día para organizar los temas que quiere subir e ir alternándolos para no aburrir a la audiencia, admite que no todo es bueno cuando uno se expone a las redes sociales: «Hai xente que me ten comentado cousas como ‘tú con ese acento gallego no estás para enseñar nada’’».

A pesar de la negatividad de algunos perfiles, la barbanzana tiene claro que quiere seguir con la cuenta y continuar haciendo crecer un proyecto que, si bien nació como algo para sus amigos y conocidos, se está convirtiendo en todo un éxito.

La ficha

Impacto. Algunos de sus vídeos han llegado al medio millón de reproducciones.

Inesperado. El proyecto nació como un apoyo extra para los alumnos de la academia en la que trabaja.

Material. La joven sueña con dar forma a un manual para practicar y aprender inglés.