A partir del sábado, la situación climatológica volverá a cambiar. La posibilidad de unos días festivos soleados y sin nubes son escasas.
11 abr 2019 . Actualizado a las 14:49 h.Si la primavera es inestable por naturaleza, la que estamos viviendo este año aún lo es más. O quizás habría que precisar que es lo que viene ocurriendo en los últimos años. Los continuos saltos entre los períodos anticiclónicos y otros dominados por las borrascas, incluso con características invernales como la que se acaba de ver estos días, especialmente el martes, son cada vez más abruptos y extremos. Puede ocurrir que de un día para otro se pase del frío, el viento y la lluvia a un escenario de temperaturas veraniegas y cielos totalmente despejados con grandes diferencias térmicas.
Algo parecido a esto, aunque no tan pronunciado como sucedió hace unas semanas, es lo que se podrá observar a partir de hoy. Del prácticamente crudo invierno de la jornada del martes, con fuertes lluvias y temperaturas muy bajas para la época, se pasará mañana viernes a una jornada plácida, con el termómetro rondando entre los 20 y los 21 grados.
Será el epicentro del anticiclón de las Azores que entrará este jueves en Galicia. Aunque en esta primera jornada lo hará de forma moderada, supondrá una tregua. El día amanecerá nublado y frío, pero a medida que pasen las horas las temperaturas irán en ascenso en cuanto las nubes se vayan disipando. El viernes, por contra, la mejoría será sensible ya desde las primeras horas. Una jornada para disfrutar del buen tiempo. Y conviene hacerlo, porque puede que solo sea un espejismo, ya que será obra de un anticiclón muy fugaz. «Es una cuña anticiclónica que entra desde Azores, pero que no consigue permanecer», explica Juan Taboada, de Meteogalicia.
A partir del sábado, la situación climatológica volverá a cambiar. Pero en un contexto marcado por una gran inestabilidad atmosférica, en una especie de barullo climático, resulta difícil realizar un pronóstico certero más allá de 48 horas. Lo que se espera es que con la llegada del fin de semana el anticiclón se debilite con la aproximación de una borrasca muy profunda situada en el sur de Groenlandia. Por ello, es más que probable que se produzca un nuevo descenso térmico acompañado de viento del sur.
Posibilidad de precipitaciones
«Puede que también llueva algo en el oeste de Galicia, pero serían precipitaciones intermitentes», apunta Juan Taboada.
Conocer lo que ocurrirá más allá del lunes, y especialmente pensando en los primeros días de Semana Santa, es prácticamente una lotería climática. Los modelos apuntan a que el lunes y el martes continuará la inestabilidad, que incluso podría prolongarse. Pero todo puede cambiar. En cualquier caso, la posibilidad de unos días festivos soleados y sin nubes son escasas.