Muchos se han sumado a sus vecinos en los desfiles y concursos de carnaval
27 feb 2020 . Actualizado a las 05:00 h.De galleta (o emoji, según se mire), de romano, de lagarto o de cirujano. Los alcaldes dieron estos días rienda suelta a su creatividad calzándose unos disfraces que, en algunos, casos, no dejaron a nadie indiferente.
Especialmente espectacular fue el Castelo que recreó la corporación vimiancesa y que abrió el desfile de disfraces el pasado sábado; y en su interior, los concejales y la alcaldesa ataviados con ropajes irmandiños. Lo hicieron para conmemorar la XXV edición del Asalto ao Castelo, que tendrá lugar en julio. Una idea similar la tuvieron en Camariñas. Tirando de su artesanía más autóctona, parte del ejecutivo se disfrazó de almohadas de palillo para honrar la XXX edición de la Mostra do Encaixe, que se celebrará en Semana Santa. Una buena forma de aprovechar una fiesta multitudinaria como es el entroido para homenajear al patrimonio local.
Otros optaron por seguir la línea de otros años, como el regidor zasense, Manuel Muíño y sus ya tradicionales trajes de personajes históricos. En esta ocasión eligió disfrazarse de senador romano, aunque ya tiene encarnado a un sarraceno, un faraón egipcio y un caballero templario.
El alcalde de Malpica, Walter Pardo, se unió a los festeiros de la sesión vermú del sábado ataviado con un cómodo (y, aparentemente, caluroso) traje de lagarto; mientras que el regidor pontecesán, Lois García Carballido, desfiló vestido de lo que parece el muñeco de las gallegas Marbú, aunque bien podría tratarse de uno de los emoticonos del Whatsapp. Queda para la imaginación de los espectadores.
Entre la corporación fisterrana, casi irreconocible juzgando el concurso de comparsas, destacó un irreconocible Kuka Sar y el regidor, vestido de cirujano.