Begoña Fernández, diseñadora de interiores: «Tu casa tiene que hablar de ti y emocionarte»

CEE

«Ese mueble del comedor de la abuela es un objeto de primera calidad que hay que saber transformar para nuestro nuevo hogar»
27 mar 2025 . Actualizado a las 21:53 h.Tanto en una nueva obra como en una reforma, es fundamental saber cómo ordenar o reordenar los espacios del hogar y con qué se van luego a ocupar. Una labor siempre difícil de imaginar y de la que se encarga como arquitecta interiorista Begoña Fernández, gerente de la galería de arte Stoupa, en Cee.
—¿Qué se debe tener claro antes de diseñar el interior de una vivienda?
—Cómo quiere vivir el cliente en su casa. La gente está habituada a tener ciertos habitáculos, pero a lo mejor el comedor no lo utilizas en todo el año y estás desperdiciando un espacio importante en casas que, cada vez, son más pequeñas. A algunas personas les cuesta a hacer esa reflexión y me dicen: ‘‘¿cómo no voy a tener un comedor?''. Si solo se utiliza una vez al año, buscaremos la forma de que, cuando se necesite, haya esa posibilidad, pero de que no moleste el resto del tiempo. O hay gente que se acostumbra a hacer vida en la cocina, pues hay que darle importancia a ese espacio.
—¿Cómo definiría su función?
—Nos encargamos de distribuir para que la casa funcione, para que el cliente pueda trabajar y vivir bien en ella. Si le gusta leer en la habitación, habrá que adecuarla para eso.
—Cada hogar debe ser muy personal.
—Claro. Muchas veces, la gente busca estilos concretos como el escandinavo o el wabi sabi. Pero tú casa tiene que hablar de ti, debe tener estilo propio. Soy muy partidaria de que, con lo que llenemos nuestro hogar tiene que emocionarnos y lo tenemos que sentir muy nuestro. No hay cosa más triste que vivir en una casa vacía de gustos o recuerdos personales. Por eso mismo, incidimos mucho en la recuperación de ciertos elementos que pertenezcan a la familia o tengan importancia familiar.
—¿A qué se refiere?
—A ese mueble del comedor de la abuela, por ejemplo. Si consigues heredar un mueble así hay que verlo cómo lo que es, un objeto muy bien ejecutado, que tiene una madera de primera calidad y que ahora mismo es impagable con lo caro que está todo. Lo que pasa es que habrá que transformarlo para adaptarlo a nuestro hogar. Tendrás un mueble de primera categoría y un recuerdo que, cada vez que lo veas, te va a emocionar.
«La pandemia hizo que muchas personas se diesen cuenta de que sus casas no se adaptaban a ellas»
Pese a la visibilidad que otorgan las redes y la oportunidad de ser autodidacta, Begoña advierte de que cada vez más gente opta por contratar este servicio de interiorismo. «Cada vez hay más gente consciente de que necesita ayuda para esto».
—La pandemia nos hizo pasar más tiempo que nunca en casa. ¿Han notado mucha más demanda desde entonces?
—No te lo puedes imaginar. Han cambiado los conceptos y la gente se molesta un poco más en tener su casa cómoda y con espacios agradables. Yo creo que muchas personas se dieron cuenta de que sus hogares no se adaptaban a su forma de vivir y de ser. A la casa al final no le haces mucho caso, porque entre el trabajo y que cuando hace bueno quieres estar fuera, pasas poco tiempo en ella. Pero el confinamiento hizo que mucha gente entendiese que no estaba cómoda en su propio hogar. Incluso cada vez hay más gente que acomoda sus patios interiores, para crear ese espacio en el que respirar aire. Nos cambió mucho la mentalidad.
—Imagínese que tiene que crear el interior de una vivienda. ¿Qué es lo más importante para usted?
—Yo es que, para la distribución de los espacios, le doy mucha importancia a cómo se va a vivir en la casa y a la función que se le va a dar.
—¿Y en cuanto a decoración?
—Eso es tremendamente personal. Yo para los acabados, lo que suelo recomendar, es que la base de revestimientos, suelos o techos, sea neutra. Y después que cada uno la vista con telas o colores que le gusten. O si se le prefiere dar un contrapunto, trabajar un poco más con diferentes texturas. Pero la base es mejor que sea neutra, porque eso te permitirá ir cambiando todo lo que aportes a medida que te guste. Y en cuanto a gustos más concretos, no podría decirlo, porque mi labor es adaptar cada casa a la persona que va a vivir en ella.
—¿Los clientes siempre tienen claro cómo la quieren o para qué?
—No siempre, muchas veces hay que ayudarlos. Pero sí creo que es muy importante construir un relato alrededor de nuestro hogar. El ‘‘qué quiero conseguir'' es por donde hay que guiarse. A veces es difícil contestarlo de primeras, pero cuando conoces cómo vive o lo que le gustaría tener, vas diseñando cómo podría cambiar la vivienda. Y ahí, repito, lo más importante es distribuir correctamente los espacios existentes.