El arquitecto Juan Creus cree que lo han elegido como muestra de una generación concreta y se muestra «muy agradecido». Hoy dará el pregón de las fiestas de A Xunqueira de Cee a las 21.30 horas
12 ago 2016 . Actualizado a las 15:48 h.Juan Creus Andrade (Cee, 1966) es doctor en Arquitectura por la Universidade da Coruña y profesor de Proyectos Arquitectónicos y Urbanismo, además de miembro del Consello da Cultura Galega desde el 2007. Junto a su esposa, Covadonga Carrasco, tienen en A Coruña desde 1994 el multirreconocido y premiado estudio Creus & Carrasco. Una creación suya representa en estos momentos a la Costa da Morte y a Galicia en el certamen de arquitectura, con el permiso de Nueva York, más prestigioso del mundo: la Bienal de Venecia.
- ¿Qué le supone haber sido elegido como pregonero?
-Estoy muy contento y agradecido porque supone que algo bueno les debo dejar a la gente de Cee. Creo que tiene bastante que ver con que formo parte de una generación de gente de determinada edad, que es también la del alcalde. En otros lugares hay costumbre de contratar actores, gente de la música. Aquí hay cierta tradición de personas locales relacionadas con el mundo de la cultura y demás y yo encantado de formar parte de esto.
- ¿Le pilla en el mejor momento de su carrera?
-Pues puede que sí. Digamos que estoy más o menos a la mitad de la carrera porque ya llevo 25 años como profesional y ahora mismo estamos con dos exposiciones en la Bienal de Venecia y otra en la Bienal de Granada. Estamos en un buen momento en cuanto a reconocimiento, que no tanto en cuanto a trabajo [sonríe].
- ¿Son sus obras en la Costa da Morte las que más éxitos les han proporcionado?
-Hicimos algo de obra fuera en A Coruña, Lugo... La Fundación Luís Seoane y la Casa Mercedes también funcionaron muy bien, pero quizás las que más repercusión tuvieron fueron las de la Costa da Morte. Lo de Malpica fue espectacular, la lonja de Fisterra también y la verdad es que ahora estamos trabajando bastante más por aquí. Al principio, mientras me asenté, nos movíamos en el ámbito de A Coruña, porque quería estar cerca de la Universidade y demás. Nos presentábamos a concursos por Galicia, pero ahora, sobre todo con lo de Casa Chao y Bela Muxía, sí que estamos más por aquí.
- ¿Es diferente crear en un sitio como este?
-Son proyectos que tienen otras particularidades, más relacionados con la naturaleza y como arquitecto eses son los retos que me gustan, conectados con el tejido social más que cosas simplemente formales. Es lo que yo he vivido desde pequeño y, por supuesto, que siempre te estimula la posibilidad de mejorarlo. Son proyectos no solo técnicos o formales, sino que tienes la ocasión de hacer cosas un poco diferentes, conectadas con el entorno y distintas de los espacios más urbanos.
- ¿Como está el plano académico? ¿Les han afectado mucho los numerosos cambios de planes?
-Nos ha trastocado bastante, entre otras cosas porque también hay menos alumnos, aunque yo animo a todo el mundo que le guste el arte, crear, dibujar... a que se apunte, aunque luego a lo mejor profesionalmente tampoco sea el mejor momento. Con los planes europeos, Bolonia y todo esto yo creo que en la escuela se ha perdido un poco el tiempo de pensar y cuando en arquitectura no se piensa las cosas no mejoran. Luego cada uno es un mundo y, por su propio interés, está costando pero sale gente realmente buena.
- En la ETS de A Coruña ustedes tienen fama de ser cocos a la hora de aprobar, pero también de alcanzar un nivel muy alto.
-[Risas] Creo que eso es un poco porque la Universidad ha sabido mantenerse en sus trece. Frente a otros países, donde la arquitectura es más fullera, por decirlo así, más light: lo dejan todo para los ingenieros; aquí eso no pasa. De ahí, creo yo, que A Coruña tenga el reconocimiento que tiene, que es bastante bueno.
Para mí la Xunqueira es sagrada
Creus no deja pasar la ocasión para revivir, ahora con su familia, algunas de las sensaciones infantiles de las fiestas de la Xunqueira. No recuerda haber faltado ningún año y programa tanto su verano como el de los suyos teniendo en cuenta siempre estas celebraciones como una cita ineludible.
-¿Acude habitualmente?
-Para mí la Xunqueira es sagrada y arrastro al resto de la familia. Es una fecha muy señalada y creo que no falté nunca. Estamos en casa en Carnota, pero siempre bajamos por la noche. Tengo recuerdos desde muy pequeñito de la tómbola y de todas las atracciones, que incluso ahora, cuando paso por ellas con mis hijos, me vienen a la cabeza.
-¿De ahí sacará material para el pregón?
-Sí claro, todavía lo estoy escribiendo y no sé del todo que voy a hacer, pero seguramente por ahí irán los tiros. Habrá un apartado para el recuerdo, para la memoria, para esa gente que compartió conmigo grandes cosas a lo largo del tiempo y también tendrá que haber algo de territorio y algo de la fiesta por supuesto. Ya digo que aún estoy en ello, porque tampoco tengo mucho tiempo para hacerlo, pero desde luego que todo lo que he vivido yo en Cee, desde muy pequeñito, tendrá su reflejo y protagonismo en el pregón. Creo que, al final, es el día 12, pero aún no tengo muy claro a que hora [21.30, paseo central de la Alameda].