José Ribagorda: «Nos dio muchísima paz y energía pasar el Fin de Año en Fisterra»

Cristina Viu Gomila
Cristina Viu CARBALLO / LA VOZ

FISTERRA

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UVAS CONTADAS | El periodista televisivo eligió la zona para descansar tras la muerte de su padre

07 ene 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

José Ribagorda, presentador de los informativos del fin de semana en Tele 5, pasó los últimos días del año en Fisterra con su familia.

—¿Su primer viaje a la zona?

—Voy muy a menudo a Galicia. Mi mujer es de origen gallego y para mí siempre es, como yo digo, uno de los sitios de mi recreo. Vamos todos los veranos, a las Rías Baixas, al pueblo de Aguete. Para mí, Galicia es un lugar de sosiego, de paz, de reencuentro con la naturaleza...

—Su mujer es también periodista.

—Ahora está dirigiendo una web de gastronomía que se llama delascosasdelcomer.com. Es hija de José Antonio Silva, santiagués y, entre otras cosas, el primer presentador que tuvo el programa Informe Semanal.

—¿Su hija seguirá la tradición?

—No lo sé. No le insto a ello ni su madre, y no parece que esté por la labor. Tampoco la estoy animando mucho. Es un oficio muy vocacional.

—¿Por qué eligieron Fisterra?

—Perdí a mi padre en la víspera de Nochebuena y la verdad es que necesitaba cambiar de paisaje, abrirme un poco a ese mar infinito que se divisa al final de la tierra, y fue algo como muy simbólico. Fuimos pensando precisamente en eso, en dejar atrás todo lo malo del año, y conjurarnos abriendo nuestro espíritu y nuestra mente a nuevas emociones, confiando en que el 2024 sea mejor. Realmente ha sido una época muy dura la que hemos vivido a nivel familiar y lo necesitaba, por eso elegí ese destino. Lo conocía porque grabé un reportaje sobre el fin del Camino. Me gustó mucho la zona y tenía mucha ilusión por enseñársela a mi hija y contarle un poco lo que significa el finisterre.

—¿Les dio la paz que buscaban?

—Nos dio muchísima paz y energía pasar el Fin de Año en Fisterra, ver ese mar embravecido. Sobre todo nos emocionó mucho la visita al santuario de Muxía. Pasamos allí unos momentos viendo el oleaje. Nos ha cargado de energía espero que para todo el año, y de la buena. La fuerza del mar, de la naturaleza, descomunal... Es un paisaje impresionante. La playa de O Rostro, que yo no la conocía. Me llenó de paz encontrar esa naturaleza tan virgen, tan exuberante. Estuve releyendo Madera de Boj, de Camilo José Cela, y me impresionó mucho la frase sobre esa playa, la que decía que se ahogaba hasta el silencio. La tengo interiorizada para siempre.

—La gastronomía es uno de sus principales intereses. ¿Qué tal han comido?

—Maravillosamente. Teníamos un buen guía, Pepe Formoso, que es un gran degustador y él me ha orientado muchísimo. Nos ha llevado a sitios extraordinarios como Lestón, en Sardiñeiro, tomando esa tortilla única de navajas. Pasamos el Fin de Año en el Trebón, que está pegado al Bela Fisterra, donde degustamos producto extraordinario, que pesca el propio chef.

—Entonces cenaron lubina.

—He conocido muchas lubinas, pero puedo decir que es la mejor que me he tomado nunca. Hecha perfectamente a la brasa, maravillosa de sabor, de textura... Una cena digna del momento. Pasamos el Fin de Año allí con ellos, con la familia del cocinero, y fue una experiencia, la verdad, muy gratificante.

—¿Qué recomendaría?

—Son tantas cosas... El marisco no tiene parangón, tomando los meses con R, degustando el producto en su momento, una centolla, una nécora, un buen percebe... Después hay guisos, platos tradicionales, cocidos, laconadas... Patata, berza... Lo tienes todo: muy buenas carnes, productos lácteos, como el queso de O Cebreiro que probé, el de Arzúa...

—¿Con qué bridaron?

—Con Casal de Armán, un vino de Ribeiro que a mí me encanta.

—¿Que es lo que espera del 2024 a nivel laboral?

—Estamos en una fase de cambios el Tele 5. Ha llegado un nuevo director, se ha despedido Pedro Piqueras... Espero que se consolide todo bien, que traslademos una muy buena imagen a la audiencia. En principio yo estoy confirmado en la edición del fin de semana, pero cambian muchos presentadores, el decorado, la infografía... Todo. Y eso lo vamos a ir viendo a lo largo de este mes de enero que se pondrán en marcha los nuevos informativos. Aspiro a adaptarme bien y seguir disfrutando del oficio porque tengo cierta edad, pero me conservo afortunadamente bien y me siento con ganas y con fuerza.

—¿Cuál ha sido la peor noticia que ha dado?

—Una personal, que me afectó muchísimo, y que tuve que contar yo, además. Fue la muerte de Pepe Domingo Castaño. Formaba parte de la familia. He vivido con él muchos momentos, era una persona para mí muy querida.

Para cotillas

¿Reyes Magos o Papá Noel?

Reyes Magos siempre, siempre, por supuesto. Hay tradiciones que no pueden pasar y hay que preservar. Soy un gran defensor de ellas y creo que esta está muy instaurada, muy interiorizada por la población. La vivimos con mucha intensidad y no se va a perder nunca. Soy un gran defensor.

¿Espera muchos regalos?

Siempre espero alguno. La ilusión no hay que perderla, aunque este año las Navidades están siendo muy tristes. Pero tenemos una niña y hay que mantener la magia y la ilusión.

¿Es de árbol o de nacimiento?

Las dos cosas. Tenemos un belén muy bonito, napolitano, y nos encanta también el árbol, aunque tenemos gatos en casa, uno pequeño que nos ha traído en jaque con el abeto. Es el que más ha disfrutado de las Navidades.

¿Qué plato no puede faltar?

Cada casa tiene sus tradiciones. Me gusta muchísimo y hemos instaurado desde un viaje a París la sopa de cebolla. Es un clásico que nunca falta como entrante caliente.

¿Sigue la costumbre de las doce uvas?

Sí, por supuesto.

Las vería en Tele 5...

Sí, yo soy fiel a Tele 5. Los informativos que veo son de mi cadena.

¿Dar o recibir regalos?

Me gusta más dar. Me encanta regalar y en casa nos gusta casi más dar de comer que comer. Recibir a gente y disfrutar de buenos momentos con los que queremos de verdad.

¿A quien le daría carbón?

A todos los que están detrás de los conflictos terribles que hemos vivido este año o en los anteriores. A todos los que hacen el mal en el mundo. Me encantaría que tuviéramos un mundo en paz cada vez más justo y más solidario y que la gente pueda vivir cada vez mejor. A todo el que hace el mal, carbón para él, a todos los niveles.